Las reservas hídricas en Ibiza han caído cuatro puntos porcentuales en el último mes y se sitúan en un preocupante 36%, según los datos difundidos este sábado por la Conselleria del Mar y del Ciclo del Agua del Govern balear. En contraste, Formentera ha experimentado una mejoría y ha pasado de escenario de prealerta por sequía a situación de normalidad, gracias a las lluvias de mayo.
En el conjunto de Baleares, las reservas se sitúan en el 51%, dos puntos menos que en abril y uno por debajo del dato de mayo del año pasado. La tendencia es descendente en todas las islas: Mallorca ha bajado del 54% al 52%, Menorca del 51% al 48% e Ibiza del 40% al 36%, convirtiéndose así en la isla con menor volumen de agua almacenada.
Formentera se recupera; Ibiza sigue en prealerta
La mejora en Formentera, que ha pasado a escenario de normalidad, es una excepción dentro del archipiélago, donde el 90,5% del territorio se encuentra todavía en prealerta por sequía. Entre las zonas que siguen bajo vigilancia se encuentra la Unidad de Demanda (UD) de Ibiza, junto a Menorca, Artà, Manacor-Felanitx, Migjorn, Es Pla y Palma-Alcúdia.
Por el contrario, solo el 9,5% del territorio se encuentra en normalidad, representado por las UD de Tramuntana Nord, Tramuntana Sud y Formentera.
Menos lluvias de lo habitual en Ibiza
Mayo ha sido considerado un mes húmedo en Baleares en términos generales, con una media de 47,1 litros por metro cuadrado, superior al promedio habitual de 32,7. Sin embargo, Ibiza se ha quedado por debajo, con 22,6 l/m², ligeramente por debajo de los 24,5 l/m² que se consideran normales para este mes. Formentera, en cambio, ha registrado 34,0 l/m², casi el doble de su media histórica de 17,9 l/m², lo que explicaría su recuperación.
El calor y la estación seca complican la situación
A pesar de las lluvias, el mes de mayo ha sido cálido, con una temperatura media en Baleares de 18,9 ºC y una anomalía positiva de 0,8 ºC. Este aumento de las temperaturas, unido a la llegada del verano y a un previsible descenso de las precipitaciones, anticipa una nueva caída de las reservas hídricas en junio, según el Govern.
El índice global de la Demarcación Hidrográfica balear se sitúa actualmente en 0,449, una cifra ligeramente superior a la de hace un año (0,433), pero aún lejos de los niveles normales (0,512 en 2023).
Una tendencia preocupante para Ibiza
La situación en Ibiza se agrava con la falta de lluvias significativas y el consumo intensivo que acompaña la llegada del verano y del turismo. La isla acumula varios meses en escenario de prealerta y, si no se produce un cambio drástico en las precipitaciones o en el uso del agua, la situación podría deteriorarse aún más en los próximos meses.
Desde el Govern se hace un llamamiento a la prudencia en el consumo y al cumplimiento de las recomendaciones de ahorro de agua, especialmente en zonas que, como Ibiza, tienen una capacidad limitada de embalsamiento y dependen en gran parte de sistemas de desalación.
