El Govern de les Illes Balears ha anunciado que ampliará las restricciones sobre el consumo de bebidas energéticas y productos ultraprocesados, que ya estaban vetados en los centros educativos, a las actividades fuera del aula como excursiones y viajes de estudios.
La presidenta autonómica, Marga Prohens, comunicó la decisión este domingo a través de su perfil en la red social X. En su mensaje destacó que esta medida se suma a otras iniciativas recientes orientadas a mejorar la salud y el bienestar de los más jóvenes, entre ellas la limitación del uso de teléfonos móviles en las aulas y la reducción de la exposición a pantallas en edades tempranas.
«Además de la prohibición del uso del móvil en clase y la limitación de las pantallas en los más pequeños, este curso ampliaremos también la restricción de bebidas energéticas y snacks ultraprocesados a las salidas escolares y los viajes de estudios», expresó Prohens.
A més de la prohibició de l’ús del mòbil a les aules i la limitació de les pantalles per als més petits, aquest curs estendrem la prohibició del consum de begudes energètiques i snacks ultraprocessats a les sortides escolars i viatges d’estudis.
Donam resposta a les… pic.twitter.com/oLYR5jk4Ab
— Marga Prohens (@MargaProhens) September 7, 2025
Un refuerzo a la política de hábitos saludables

Con este paso, el Ejecutivo balear busca dar respuesta a las inquietudes planteadas por muchas familias, que ven con preocupación la proliferación del consumo de productos poco saludables entre niños y adolescentes. La presidenta subrayó que el objetivo es fomentar una buena alimentación y consolidar hábitos de vida saludables, al mismo tiempo que se impulsa un uso más responsable de la tecnología.
La medida se pondrá en marcha mediante un decreto que ya está en fase de tramitación en la Conselleria de Educación y Universidades, según adelantó el diario Última Hora. Este nuevo texto legal se integrará con el decreto 39/2019, dedicado a la promoción de la dieta mediterránea, que actualmente prohíbe la venta de bollería industrial y refrescos azucarados en cafeterías de colegios y centros sanitarios de las islas.
¿Por qué se aplica esta norma?

En los últimos años, diferentes estudios han alertado sobre el incremento en el consumo de bebidas energéticas entre la población adolescente, asociado a efectos adversos como alteraciones del sueño, nerviosismo o problemas de concentración. Asimismo, los ultraprocesados han sido vinculados a una dieta menos equilibrada y a un mayor riesgo de obesidad infantil.
El Govern balear pretende, con estas nuevas restricciones, extender al ámbito extracurricular el mismo marco de protección alimentaria que ya rige dentro de los colegios, de modo que no exista contradicción entre lo que se fomenta en las aulas y lo que ocurre en las actividades educativas fuera de ellas.
La iniciativa refuerza así la apuesta del Ejecutivo por consolidar las Islas Baleares como una comunidad pionera en la promoción de la salud entre los más jóvenes, poniendo el acento en la dieta mediterránea y en estilos de vida equilibrados como modelo de referencia.