La Confederación de Asociaciones Empresariales de Baleares (CAEB) ha mostrado su apoyo a la decisión del Congreso de los Diputados de rechazar el proyecto de Ley de reducción de jornada laboral. La patronal balear considera que esta medida hubiera tenido un grave impacto en la economía, el empleo y el consumo, especialmente en las pymes.
CAEB agradece la responsabilidad de los grupos parlamentarios y recuerda que, como siempre ha defendido, es imprescindible recurrir al diálogo social real para abordar reformas de tanta trascendencia para empresas y trabajadores.
La patronal sostiene que la propuesta aprobada de manera unilateral por el Gobierno suponía una intromisión en la autonomía de la negociación colectiva, al impulsarse al margen de la Mesa de Diálogo Social. Además, advierte de que esta reducción de jornada implicaba un incremento adicional de los costes laborales –sumado a los del SMI y las cotizaciones sociales– y una pérdida de productividad.
En el caso de Baleares, donde la economía se apoya mayoritariamente en el sector servicios, la adaptación hubiera resultado aún más compleja. Muchas empresas dependen de la presencialidad y, a ello, se suma la escasez de mano de obra cualificada y no cualificada que arrastra el archipiélago en los últimos años.
Por todo ello, CAEB subraya que cualquier regulación de la jornada debe abordarse sector a sector y empresa a empresa, evaluando el margen de productividad y las necesidades organizativas de cada empleador, en lugar de imponer una norma rígida y generalizada.