El sindicato STEI ha alertado que las aulas de los centros educativos de Pitiusas se enfrentan a condiciones de calor y humedad “insostenibles”, alcanzando temperaturas de hasta 35 grados.
El sindicato recuerda que situaciones similares ya se registraron en junio, cuando los termómetros llegaron a los 40 grados, y denuncia que esta problemática se ha prolongado durante años sin soluciones efectivas.
Efectos en alumnado y profesorado
Según STEI, estas condiciones dificultan seriamente el aprendizaje, aumentan la irritabilidad del alumnado y perjudican tanto al docente como al personal no docente. En declaraciones a Radio Ibiza, Pere Lomas, portavoz del sindicato, ha señalado que “sudar la gota gorda a diario” se ha convertido en la norma para quienes tienen que impartir clases. Pero ha insistido: «Es imposible dar clase o disfrutar de las actividades que se realizan en el patio, muchos de ellos sin un mínimo espacio de sombra que haga de refugio climático».
Reclamaciones al Govern
El sindicato exige a la Conselleria de Educación que active de inmediato el Plan de Climatización aprobado en 2023, que incluye una auditoría del estado de los centros y un plan de inversiones dentro del Fondo de Cooperación Territorial. Según lo pactado, dicho plan debía haberse puesto en marcha en 2023 y culminar el curso 2023-2024.
Además, STEI urge a los centros a denunciar ante el Servicio de Prevención de Riesgos Laborales las aulas que superen temperaturas reglamentarias, para que intervenga el Instituto Balear de Infraestructuras y Servicios Educativos (IBISEC).
El sindicato recuerda que la normativa vigente estipula que los espacios donde se realizan tareas sedentarias deben mantenerse entre 17 y 27 °C, y los destinados a tareas ligeras entre 14 y 25 °C.