La FIFA impuso una sanción de un año sin jugar al defensa vizcaíno Jon Irazabal, además de una multa económica, después de confirmar su implicación en un escándalo de documentos falsificados para obtener la nacionalidad malaya. La decisión sacude su reciente salto al fútbol internacional y deja su futuro en suspenso.
¿Qué pasó exactamente?
La sanción se relaciona con irregularidades detectadas en la presentación de documentación de nacionalización para que varios futbolistas representaran a Malasia. En ese contexto, Irazabal fue incluido entre los siete jugadores castigados por alinearse en un partido bajo un estatus presuntamente falso.
La comisión disciplinaria de la FIFA concluyó que hubo manipulación de documentos, violando las normas que regulan la elegibilidad de jugadores para selecciones nacionales.
Desde el organismo internacional se señaló que las pruebas comprobadas justificaban la penalidad de 12 meses de suspensión, contados desde la notificación del fallo. Además del castigo deportivo, cada jugador implicado recibió una multa de 2.000 francos suizos, mientras que la Federación de Fútbol de Malasia (FAM) fue sancionada con 350.000 francos suizos por su papel en el caso.
Un golpe a su carrera y su presente internacional

Irazabal, nacido en Galdácano en 1996, había debutado con la selección malaya en junio de 2025 en el partido ante Vietnam, tras nacionalizarse recientemente. Su fichaje por el Johor Darul Ta’zim de Malasia (club que contrató sus servicios recientemente) también quedará empañado por esta suspensión.
Este castigo no solo le impide competir durante todo un año, sino que daña su credibilidad y complica su futuro profesional. A su vez, abre interrogantes sobre la validez del partido en que participó bajo esa documentación: algunos observadores exigen que se anule el resultado por alineación indebida.
Cómo queda su trayectoria y la posible apelación

La sanción generó reacciones en el mundo del fútbol y en las federaciones involucradas: mientras los aficionados expresan decepción por el impacto en la imagen del jugador, no se descarta que Irazabal o su representación interpongan un recurso ante el Tribunal del Fútbol de la FIFA, buscando revertir o disminuir la penalidad.
Además, la Federación de Malasia ya está bajo escrutinio internacional. Su responsabilidad institucional en el proceso de nacionalización irregular podría acarrear consecuencias más allá de multas económicas, incluyendo sanciones mayores o cuestionamientos en su gestión interna.