La ginebra gallega Vánagandr, una de las más premiadas del mundo, se ha convertido en una nueva joya dentro del catálogo de bebidas premium de Hijos de Rivera, la compañía matriz de Estrella Galicia. La empresa coruñesa ha adquirido la destilería fundada por Enrique Pena, aunque el creador de la marca continuará ligado al proyecto como maestro destilador.
Hasta ahora, Vánagandr era un producto de autor, elaborado en Cambre (A Coruña) y distribuido de forma limitada, principalmente en tiendas especializadas y locales de alta gama. Su producción anual apenas alcanzaba las 8.000 botellas, pero su calidad la convirtió en un referente internacional en el mundo de los destilados.
La historia
La historia de Vánagandr comenzó hace más de una década, cuando Enrique Pena, entonces consultor empresarial, decidió abandonar su carrera para dedicarse a una de sus pasiones: la destilación artesanal. Regresó a Galicia con la idea de crear una ginebra que combinara tradición, pureza y carácter atlántico, y lo consiguió.
En poco tiempo, su proyecto personal se transformó en una marca reconocida dentro y fuera de España. Los premios internacionales avalan su trayectoria: fue elegida Mejor Ginebra del Mundo en 2024 por el International Spirits Challenge, y repitió éxito en 2025 con un doble oro en la misma competición.
Ahora, con la entrada en el grupo Hijos de Rivera, la ginebra gallega afronta una nueva etapa de expansión. La operación —cuyo importe no ha trascendido— permitirá aumentar de forma notable la capacidad de producción y la presencia internacional de Vánagandr.
Refuerzo del porfolio premium de Hijos de Rivera
Para Hijos de Rivera, esta adquisición supone un paso más en su estrategia de diversificación. El grupo, conocido mundialmente por su cerveza Estrella Galicia, ya contaba con otras referencias dentro del segmento de bebidas espirituosas, como la ginebra F de Formentera, pero con la incorporación de Vánagandr refuerza su apuesta por los destilados de alta gama.
Desde la compañía destacan que la unión permitirá mantener la esencia artesanal que caracteriza a la marca, pero con el respaldo logístico y comercial de un grupo con presencia en más de 60 países.
La operación sitúa a Vánagandr como uno de los productos gallegos más internacionales y consolida a Hijos de Rivera como un referente en innovación dentro del sector de las bebidas.











