La Secretaría de Estado de Justicia ha vuelto a sacar a concurso las obras de acondicionamiento de la denominada zona de reserva del nuevo edificio de juzgados de Ibiza, ubicado en la plaza de sa Graduada. El contrato tiene un valor estimado de 8,64 millones de euros y un plazo de ejecución de 20 meses desde la firma, mediante procedimiento abierto y sin admitir variantes.
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Ofertas hasta el 3 de diciembre
Las empresas interesadas pueden presentar sus ofertas hasta las 14.00 horas del 3 de diciembre, bien de forma electrónica a través de la Plataforma de Contratación del Sector Público, bien de manera presencial en la sede de la Secretaría de Estado de Justicia en Madrid. El anuncio detalla que se aceptará también la facturación y el pago electrónicos.
El pliego fija como criterio principal de adjudicación el precio, con una ponderación del 60 %, mientras que los juicios de valor (criterios cualitativos) puntúan un 30 % y otros criterios automáticos, el 10 %. La apertura de las ofertas económicas está prevista para finales de diciembre.
Un primer concurso desierto
Esta nueva licitación llega después de que el primer intento para ejecutar esta segunda fase quedara desierto el pasado verano. Entonces, el contrato se sacó a concurso con un presupuesto base de unos 6 millones de euros (sin impuestos) y un valor estimado en torno a 7,2 millones. Solo una empresa, Vilor Infraestructuras, presentó oferta para acondicionar algo más de 4.000 metros cuadrados de superficie pendiente, pero su propuesta superó el presupuesto y la licitación se declaró desierta.
El nuevo intento de Justicia no evita, sin embargo, el retraso acumulado por el proyecto. La segunda fase de los juzgados de Ibiza suma ya casi tres años de demora y las previsiones que manejan fuentes judiciales apuntan a que el edificio no podrá darse por completamente acabado, como mínimo, hasta 2028. Hasta entonces será necesario mantener parte de los órganos judiciales en dependencias alquiladas en el CETIS, con un coste anual que ronda los 600.000 euros.
Unificar sedes y dejar de pagar alquileres
El inmueble judicial tiene una superficie construida total de unos 12.250 metros cuadrados. La primera fase, recibida en 2019, permitió poner en servicio alrededor de 8.170 metros cuadrados, donde ya se ubican los juzgados de jurisdicción penal. Queda por acondicionar algo más de 4.000 metros cuadrados correspondientes a la zona de reserva, necesarios para trasladar el resto de órganos y poder unificar en un único edificio la sede judicial de la ciudad. La culminación de esta segunda fase permitirá dar de baja los alquileres actuales de sedes externas y planificar la entrada en funcionamiento de nuevos juzgados cuya creación se considera necesaria.
Eficiencia energética y mejor servicio forense
El proyecto de acondicionamiento no solo prevé completar espacios de oficinas y salas, sino también introducir mejoras en la eficiencia energética del edificio. Entre las actuaciones previstas figuran la instalación de unas 50 placas fotovoltaicas sobre la cubierta de las instalaciones y la mejora del aislamiento y de los sistemas de protección solar, especialmente en la fachada principal. Además, la segunda fase contempla una notable mejora de la Forensía de Ibiza, que podrá realizar autopsias y otros servicios periciales en los sótanos del propio edificio judicial, evitando desplazamientos y optimizando la atención a los procedimientos.
