Cloudflare, la multinacional estadounidense especializada en infraestructura web y ciberseguridad, ha vuelto a sufrir un fallo global que ha afectado el funcionamiento de numerosas plataformas digitales y servicios online en todo el mundo. Es la segunda interrupción masiva en menos de dos semanas, lo que intensifica las preocupaciones sobre la fiabilidad de la infraestructura en la nube.
La compañía ha reconocido el problema a través de su canal oficial: “Estamos investigando problemas con el Panel de Control de Cloudflare y las APIs relacionadas”. En el mismo comunicado han añadido: “Los clientes que usan el Dashboard / las APIs de Cloudflare se ven afectados, ya que las solicitudes pueden fallar y/o pueden mostrarse errores”.
Zoom, Fortnite y Canva, entre los servicios afectados
El impacto del fallo fue inmediato y generalizado. Entre las primeras plataformas en registrar incidencias se encuentran Canva, la herramienta de diseño y publicación, y Zoom, el popular servicio de videollamadas. A estos se sumaron rápidamente videojuegos en línea como Valorant, Fortnite, League of Legends y la Epic Games Store, lo que afectó a millones de usuarios en todo el mundo.
También se reportaron problemas en el sector bancario español, con interrupciones en el acceso a las páginas web de entidades como CaixaBank y Bankinter, lo que evidencia la amplitud del ecosistema digital que depende de Cloudflare.
Según la plataforma Downdetector, que monitorea las incidencias en tiempo real, los primeros reportes comenzaron a registrarse a las 8:00 (hora peninsular española), aunque el volumen de informes se disparó alrededor de las 10:00.
Un servicio clave para el funcionamiento de internet
Cloudflare es uno de los actores fundamentales de la computación en la nube, actuando como intermediario entre los proveedores de contenido y las webs que acceden a esos contenidos. Su servicio incluye una potente red de distribución de contenidos (CDN), lo que la convierte en una pieza esencial del andamiaje técnico de internet.
Debido a esta centralidad, un fallo en sus sistemas tiene repercusiones inmediatas en miles de páginas y aplicaciones que dependen de su tecnología para mantenerse operativas. Esta situación se repitió el pasado 18 de noviembre, cuando Cloudflare estuvo caída durante cuatro horas, afectando también a plataformas como X (antes Twitter), ChatGPT, Canva y muchas otras.
Una infraestructura digital vulnerable
El incidente de hoy se suma a una cadena reciente de fallos en los servicios de computación en la nube. Hace aproximadamente mes y medio se produjo una caída en los sistemas de AWS, la división cloud de Amazon, y tres semanas más tarde Azure, la nube de Microsoft, también experimentó problemas.
Estos eventos ponen de manifiesto la vulnerabilidad estructural de la red global de internet, cuya estabilidad depende de un número limitado de proveedores. La concentración de servicios esenciales en unas pocas compañías tecnológicas incrementa los riesgos de colapsos en cadena cuando se produce un fallo.
Sin explicaciones técnicas detalladas
Hasta el momento, Cloudflare no ha ofrecido un diagnóstico técnico más allá de la notificación inicial. Tampoco ha aclarado si se trató de un error interno, un fallo en la actualización de sus sistemas o algún tipo de ataque externo. La falta de información contribuye a la incertidumbre entre sus millones de clientes y usuarios indirectos.
La repetición del fallo en un periodo tan corto ha suscitado reacciones de preocupación en el ámbito tecnológico y empresarial, especialmente entre las compañías que dependen del correcto funcionamiento de Cloudflare para sus operaciones digitales.












