La Policía Local de Sant Antoni de Portmany ha reforzado durante el mes de noviembre la vigilancia en diferentes puntos del municipio mediante un dispositivo específico dirigido a controlar botellones y concentraciones de menores. La actuación, desarrollada principalmente durante los fines de semana, tiene como objetivo prevenir el consumo de alcohol en la vía pública, proteger a los menores y garantizar el descanso de los vecinos.
El balance del operativo es significativo: los agentes han tramitado 51 denuncias por infracciones de la ordenanza municipal de convivencia relacionadas con el consumo de alcohol en espacios públicos. Además, se han interpuesto 11 denuncias por vulnerar la Ley 4/2015 de Seguridad Ciudadana, vinculadas a la tenencia o consumo de sustancias estupefacientes.
86 personas identificadas y ocho actas de aprehensión
Durante las intervenciones se procedió a la identificación de 86 personas, de las cuales 59 eran menores y 27 adultos. Los agentes también levantaron ocho actas de aprehensión de sustancias detectadas en las zonas controladas. De forma paralela, la Policía Local realizó inspecciones en diversos locales de ocio y bodegas del municipio con el fin de prevenir la venta de alcohol a menores y otros comportamientos ilícitos.
Estos dispositivos se llevan a cabo en coordinación con la Unidad de Menores y forman parte del refuerzo policial impulsado por la concejalía de Seguridad Ciudadana para aumentar la presencia policial durante fines de semana, festivos y eventos multitudinarios.
Actuaciones en las zonas más conflictivas del municipio
El operativo se ha concentrado en los puntos con mayor afluencia juvenil y mayor incidencia de comportamientos incívicos, entre ellos plazas, paseos, parques infantiles, la estación de autobús, aparcamientos, zonas de ocio y áreas del litoral. La presencia de agentes en estos espacios busca prevenir situaciones de riesgo, evitar molestias vecinales y combatir conductas como el vandalismo, los ruidos o los conflictos entre jóvenes.
El botellón, en descenso: de 30 denuncias a solo 7 en un mes
La evolución del dispositivo de noviembre muestra una tendencia positiva y una mayor efectividad del control policial. Mientras que en el primer fin de semana del mes se registraron 30 denuncias por botellón, la cifra fue disminuyendo progresivamente hasta alcanzar solo siete denuncias en el último fin de semana.
Desde el Ayuntamiento señalan que esta reducción refleja el impacto del operativo y la necesidad de mantenerlo durante los meses de invierno.
Un dispositivo que continuará toda la temporada
La Policía Local mantendrá este operativo durante toda la temporada de invierno con el propósito de reforzar la convivencia y la seguridad en los espacios públicos. El Ayuntamiento subraya que estas intervenciones son fundamentales para garantizar el cumplimiento de las ordenanzas municipales y proteger especialmente a los menores ante situaciones de riesgo.
