El Parlament balear ha instado al Govern a trabajar en la creación de una unidad del dolor en el Hospital Can Misses, en Ibiza, destinada a la atención especializada de pacientes con dolor crónico y dolor agudo complejo, según el acuerdo alcanzado este martes en la Comisión de Salud. La iniciativa se ha aprobado por unanimidad y responde a una proposición no de ley (PNL) presentada por el PP.
La diputada popular Sandra Palau ha defendido la propuesta, que reclama que esta nueva unidad sanitaria esté integrada por un equipo multidisciplinar, con profesionales de anestesiología, enfermería, psicología, fisioterapia y otras especialidades sanitarias, con el objetivo de ofrecer una atención integral a los pacientes afectados. Mallorca y Menorca ya cuentan con unidades sanitarias de este tipo.
Además, la PNL aprobada solicita al Ejecutivo autonómico que incluya la dotación presupuestaria necesaria en los próximos presupuestos para garantizar tanto la puesta en marcha como el mantenimiento de esta unidad del dolor en el hospital de referencia de Ibiza, el Hospital Can Misses.
Empate en otra iniciativa sobre el Hospital Joan March
En la misma sesión, la Comisión de Salud ha debatido otra proposición no de ley presentada por el PSIB, relativa al Hospital Joan March (Bunyola), cuya votación ha terminado en empate, con seis votos a favor (Unidas Podemos, MÉS per Mallorca y PSIB) y seis en contra (PP).
La iniciativa reclamaba que el Govern hiciera público el acta de la comisión bilateral de seguimiento del convenio del Programa de Impulso a la Rehabilitación de Edificios Públicos (Pirep), correspondiente al 13 de diciembre de 2023, así como cualquier documento que justificara la retirada del Hospital Joan March de la fase dos del programa.
Asimismo, la propuesta pedía al Ejecutivo autonómico que presentara en un plazo máximo de tres meses un plan de rehabilitación integral del hospital, con calendario, presupuesto y fuentes de financiación detalladas, incluyendo actuaciones estructurales, energéticas y funcionales, y que garantizara que la reforma se ejecutara con fondos públicos suficientes, ya fueran europeos, estatales o autonómicos













