El cielo de Ibiza ha quedado cubierto de polvo en suspensión y las lluvias anunciadas, en combinación con el viento, han generado una lluvia de barro por la isla que ha manchado las calles, terrazas y coches.
La previsión de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), apunta cielos nubosos con probabilidad de precipitaciones para las próximas horas. Cuánto más se acerca la noche, menos las probabilidades caen. Las temperaturas serán de entre 22 y 27 grados, con algunas ráfagas de viento que moverán el barro.