El presidente de Compromís y consejero de Sa Unió, Javi Serra, ha anunciado que ha recibido plena autorización de la junta de su partido para negociar un acuerdo con Gent per Formentera (GxF) y PSOE con el objetivo de formar un nuevo gobierno en el Consell de Formentera.
Esta decisión llega en un momento crítico, después de la dimisión de seis consejeros del equipo de gobierno, lo que ha dejado a la institución insular en un estado de parálisis.
Serra ha declarado que la propuesta de GxF es «lícita» pero llega «bastante tarde», recordando que Sa Unió ya había propuesto una moción de censura anteriormente, la cual fue rechazada por los partidos de la oposición.
Según Serra, es momento de sentarse a la mesa y discutir las condiciones sin establecer líneas rojas, señalando que «lo lógico» sería que Sa Unió, y no sólo Compromís, impulse el cambio de gobierno.
El presidente de Compromís, en diálogo con Radio Illa, ha subrayado la inviabilidad de reincorporarse a un gobierno liderado por Llorenç Córdoba, afirmando que después de seis meses de intentos fallidos de reconciliación, no hay forma de llegar a un acuerdo con él.
Todos los grupos políticos del pleno, incluyendo Sa Unió, GxF y PSOE, han solicitado la dimisión de Córdoba para resolver la crisis de gobernabilidad. Serra ha argumentado que la dimisión de Córdoba solucionaría la crisis, permitiendo que la institución vuelva a funcionar.
Además, Serra ha abordado su participación accionaria en Marina de Formentera, admitiendo que posee un 22,4% del accionariado, lo cual excede el límite permitido para consejeros del gobierno. Ha explicado que está en proceso de vender estas acciones para cumplir con la ley y ha asegurado que siempre se ha abstenido de votar en decisiones donde podría haber un conflicto de intereses.
Serra ha lamentado que para participar en la política se vea obligado a deshacerse de su patrimonio, destacando que esto puede desalentar a personas productivas de dedicarse al servicio público.