O beach suma más color y atractivo aún a sus propuestas gastronómicas tras la apertura de Eat Me Ibiza, establecimiento que aunque inauguró hace poco más de dos meses ya se ubica como una de las opciones insoslayables para comer abundante, rico y satisfactorio al paladar en Sant Antoni. Con perfecto potencial de cadena, Eat Me permite disfrutar de una deliciosa hamburguesa simple pero eficaz por la calidad de sus ingredientes y la combinación acertada de ellos y una pizca de originalidad sin traicionar al clásico, sumando además a sus preciosas vistas del puerto de Sant Antoni.
Claro, Eat Me no ofrece sólo smash burgers (aunque esta sería la recomendación de este medio, sin dudarlo). Tacos, shakes, cocktails, hot dogs y más son parte de una carta escueta pero bien comisariada, para emplear un término artístico aplicado a un menú. Más aún, si se considera que, de querer un comensal una opción más liviana, la potente Eat Me se complementa con su “hermana saludable” ubicada exactamente al lado, apenas unos metros más allá, la Skinny Kitchen.
Así, con una atención amable e impecable en inglés y español, Eat Me permite elegir entre una variedad de cocktails a la (breve) espera de que esté listo el plato solicitado, y disfrutar de un momento muy agradable tanto fuera, bañado por la brisa marina, como dentro, ya sea con amigos, en familia o en pareja.
Eat me: para compartir
Para compartir es una buena palabra para definir a Eat Me. Y compartir puede tomar cuerpo en la opción de hacer un tapeo de sus patatas fritas, sus acompañamientos y sus alitas de pollo. ¿Un trío infalible y apto para todo público?: las patatas fritas con un toque de pimienta (pero buenas para cualquier paladar, sin miedo), crocantes por fuera y suaves por dentro, como ha de ser; junto a la crocantez y toque dulce de unos aros de cebolla; más el sabor bien español de unas croquetas de jamón impecables.
Pero no es una idea que se le haya ocurrido a los comensales de La Voz de Ibiza. Eat Me ya lo pensó y sus tacos (o las mencionadas hamburguesas) se pueden ordenar tanto de forma individual como para compartir, en una combinación de sus variedades: camarones con lima y miel; setas con salsa BBQ; o de beef n’cheese melt, con una carne ahumada y cocinada por largas horas que se deshace en la lengua.
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La comida puede (¡y debería!) terminar con postre: churros y otras opciones ofrecen el fin dulce de la que siempre quiere uno disfrutar a pesar de haber quedado lleno y satisfecho con el plato principal.
Las ‘smash burgers’ de Eat Me
Finalmente, no se puede cerrar este artículo sin describir breve pero amorosamente el plato sencillo pero preferido por muchos alrededor de todo el mundo, cosmopolita y presente en sus versiones más callejeras hasta en aquellas gourmet de exclusivos restaurantes, el que es quizás el corazón de Eat Me y que da título a este artículo: sus hamburguesas, más precisamente sus smash burgers.
Con un pan brioche que representa casi una parada ideológica al pan de papa que viene en tendencia desde hace ya tiempo, hay desde una opción más simple y clásica como la ‘Smash me’ hasta una más elaborada como la ‘The big back brisket’.
Ya sea con lechuga y pepinillos, o con fried chicken acompañado de kimchi, las hamburguesas de Eat Me no pueden dejar de probarse, disfrutarse y recomendarse: su carne y punto acertados que danzan con salsas y acompañamientos propios y conocidos a la vez, son una opción infalible tanto para los amantes de una buena hamburguesa como para los indiferentes a ella, que no podrán negar su delicia y calidad.
