El año 2024 concluye con un registro significativo de incendios forestales en las Islas Baleares. Según el balance de la Conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Natural, se contabilizaron 96 incendios que afectaron un total de 318,7 hectáreas en todo el archipiélago.
Mientras Mallorca lidera las estadísticas con la mayor cantidad de superficie quemada, Ibiza y Formentera también han sufrido daños medioambientales que preocupan a las autoridades locales.
Incendios forestales en Ibiza y Formentera
En Ibiza, los incendios forestales registrados fueron 22, alcanzando una superficie total quemada de 3,19 hectáreas. De estas, 1,53 hectáreas corresponden a áreas arboladas, mientras que 1,66 hectáreas se consideran desarboladas. Por su parte, Formentera reportó seis incendios que afectaron 0,29 hectáreas, con 0,27 hectáreas de superficie arbolada y 0,02 hectáreas desarboladas.
El resto de las islas también presentaron cifras alarmantes. En Menorca, se quemaron 8,22 hectáreas en cinco incendios, mientras que en Mallorca se produjeron incendios de gran magnitud, como el de s’Albufera y el de Andratx, que consumieron más de 100 y 70 hectáreas respectivamente, sumando un total de 306,97 hectáreas quemadas.
Cómo prevenir los incendios forestales
El Govern de Baleares insiste en la importancia de adoptar medidas preventivas para evitar incendios forestales, especialmente en las épocas más vulnerables del año.
Entre las principales recomendaciones se destacan evitar el uso de fuego en zonas boscosas durante periodos de altas temperaturas, mantener los terrenos despejados de vegetación seca que pueda actuar como combustible y respetar las normativas locales sobre actividades que puedan generar riesgos de incendio.
La colaboración ciudadana también es crucial en la lucha contra los incendios. Ante cualquier actividad sospechosa o conato de incendio, se insta a la población a contactar de inmediato con el servicio de emergencias 112 para que los equipos puedan actuar con celeridad.
Con un total de 318,7 hectáreas afectadas, las autoridades locales reiteran la importancia de la prevención, ya que el impacto de los incendios no solo afecta la biodiversidad de las islas, sino también su sostenibilidad medioambiental y calidad de vida.