El Ayuntamiento de Ibiza ha instalado cinco “radares pedagógicos”. Su objetivo es “sensibilizar a las personas conductoras sobre el exceso de velocidad”, ha explicado el municipio. Por ello, aunque todos estos dispositivos muestran en un panel la velocidad a la que circulan los vehículos por la zona, sus registros no sirven para sancionar.
Los nuevos dispositivos, que todavía están en fase de pruebas, se encuentran en la avenida Ocho de Agosto, calle Es Cubells, calle des Jondal, avenida de Sant Jordi y en la avenida Pere Matutes Noguera.
Con esta iniciativa, se quiere informar y concienciar antes que multar, ya que servirán como aviso a los vehículos que deben reducir la velocidad en estos tramos concretos. Se trata de una de las
medidas impulsadas durante este mandato por el Consistorio para mejorar la movilidad en el municipio y garantizar la seguridad a conductores y peatones.
En este marco, el último viernes 17 de enero entró en vigor la Ordenanza Municipal de Circulación, que incluye la limitación de la velocidad a 30km/h en las calles urbanas del municipio de con motivo de reducir la siniestralidad, ofrecer una movilidad más fluida y una reducción en la contaminación.
Por otra parte, la Policía Local de Ibiza ha adquirido un nuevo instrumento pionero de medición para detectar aquellos vehículos de movilidad personal que superen la velocidad autorizada.