La pesca recreativa en Ibiza y Formentera se enfrenta a nuevas limitaciones con la implantación de cuotas diarias de captura para distintas especies, incluyendo los meros.
La medida, promovida por la Conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Natural a través de la Dirección General de Pesca, ha sido consensuada con los consells insulares y el sector pesquero dentro de la Comisión de Cogestión de la Pesca Marítima Recreativa en las Islas Baleares.
La nueva normativa, publicada en el Boletín Oficial de las Islas Baleares (BOIB), establece restricciones tanto para pescadores individuales como para embarcaciones, con el objetivo de regular la actividad y evitar la sobreexplotación de los recursos marinos.
Límites en las capturas por persona y por embarcación
La resolución establece dos tipos de cuotas: una diaria individual y otra diaria por embarcación. En el caso de la cuota individual, la limitación afecta a pescadores submarinos, pescadores desde tierra y recreativos en embarcaciones. Por su parte, la cuota por embarcación se aplicará sin importar el número de personas a bordo.
Para los meros (Epinephelus spp.), tanto en la pesca individual como en embarcaciones, el límite será de un ejemplar al día. En cuanto a otras especies, la normativa establece restricciones similares para la lubina (Dicentrarchus labrax), mientras que en el caso del dentón (Dentex dentex), se permitirá capturar hasta dos ejemplares por persona y tres por embarcación.
El director general de Pesca, Antoni M. Grau, ha destacado que la decisión se ha tomado con el respaldo del sector, que ha reclamado un mayor protagonismo en la regulación de la actividad pesquera recreativa. “El principal objetivo es conservar los recursos marinos de las Islas Baleares mediante una pesca sostenible y en la que el sector se vea involucrado”, ha señalado Grau.
Posibles futuras restricciones
Desde la Dirección General de Pesca no descartan futuras modificaciones en las cuotas o la inclusión de nuevas especies bajo regulación, como el cabracho. La posibilidad de ampliar las restricciones dependerá de los estudios sobre el estado de las poblaciones marinas y del consenso dentro de la Comisión de Cogestión de la Pesca Marítima Recreativa.
En Baleares, la pesca recreativa cuenta con miles de aficionados y representa un importante movimiento económico y comercial. La regulación busca un equilibrio entre la conservación de los ecosistemas marinos y la continuidad de esta actividad de ocio. “La mayoría de los pescadores recreativos están comprometidos con la preservación de los recursos marinos y quieren contribuir a su sostenibilidad”, ha subrayado Grau.