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Los socialistas prevén «una flota de autobuses viejos, de segunda mano y contaminantes» en la nueva contrata del transporte público

El Grupo Socialista lamenta que el Consell no haya aprovechado ayudas de otras administraciones para ser más ambicioso en la licitación del concurso de las líneas regulares de autobús que contempla un 14% de vehículos sostenibles de los 99 previstos y que pueden ser diésel, de segunda mano y tener una antigüedad máxima de 12 años
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El Grupo Socialista en el Consell d’Eivissa lamenta que el Consell Insular de Vicent Marí «condenará a la isla de Ibiza a seguir utilizando un transporte público con autobuses viejos, de segunda mano y contaminantes, al menos, hasta el año 2034», fecha en la que caducaría la concesión que recientemente ha salido a licitación.

La licitación de las nuevas concesiones prevé que «solo 10 vehículos serán eléctricos y 4 serán híbridos, de una flota prevista de un total de 99 autobuses».

El resto podrán ser de propulsión diésel y podrán tener una antigüedad máxima de 12 años y ser de segunda mano, como los autobuses viejos del Ayuntamiento de Madrid comprados en una subasta, retirados por razones medioambientales, y que Vicent Marí presentó como «nuevos».

Los socialistas critican las excusas de Vicent Marí por no implementar autobuses más sostenibles, atribuyendo, como siempre, la responsabilidad al Govern balear de Francina Armengol.

Por un lado, insisten los socialistas ibicencos, es absolutamente falso que el Consell Insular haya solicitado financiación para implementar autobuses más sostenibles. La única nueva inversión por la que se preocupó Vicent Marí para obtener financiación del Govern fue el Palacio de Congresos de Santa Eulària, no el transporte público.

Además, Vicent Marí no ha solicitado ni un euro de los fondos europeos Next Generation para adquirir vehículos no contaminantes, a pesar de que existen ayudas en movilidad destinadas precisamente a este propósito. A todo esto, debemos añadir que Vicent Marí tiene más de 40 millones de euros en los bancos en remanentes, que podría destinar perfectamente a mejorar el transporte público.

El grupo del PSOE lamenta que el nuevo transporte público de Ibiza no dará el salto de calidad y sostenibilidad que la isla merece, debido a un proyecto que no se ha adaptado a los avances tecnológicos y a las oportunidades de financiación actuales.

Gracias a Vicent Marí, nuestra isla seguirá teniendo, al menos hasta 2034 o 2035, un transporte con vehículos que los socialistas prevén «usados, antiguos y contaminantes» cuando «Ibiza debería ser pionera y un referente en movilidad».

El Grupo Socialista recuerda que «todas las competencias están en manos del Consell Insular, y si considera que no dispone de suficiente financiación, podría haber buscado ayudas en otras administraciones, lo cual tampoco ha hecho».

«La mala gestión del transporte público» por parte de Vicent Marí ha sido «una constante desde 2019, con el retraso en las nuevas concesiones, que acaban de salir a licitación, y la degradación del servicio actual y la falta de inversiones en paradas e intercambiadores».

Para el Partido Popular, «el transporte público no es una prioridad, como lamentablemente hemos visto a lo largo de todos estos años».

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