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200 AL AÑO EN SANT ANTONI

El largo camino para retirar los vehículos abandonados en la calle

Tras dejar la notificación en el vehículo, la Policía ha de esperar un mes para retirarlo, un desde la notificación al propietario o bien desde la publicación en el BOE antes de enviarlo a un centro de reciclaje autorizado
IMG PL Vehiculos abandonados
Vehículo abandonado en el polígono de Montecristo.

La Policía Local de Sant Antoni, a través de la Unidad de Medio Ambiente (UMA), llevó a cabo la semana pasada una operación intensiva en la zona del polígono de Montecristo con la retirada de cinco automóviles abandonados, a los cuales se les ha presentado una denuncia por violar la ordenanza municipal sobre residuos.

A lo largo del año, se realizan diversas acciones por parte de los agentes y se llevan a cabo inspecciones periódicas en las áreas más problemáticas como medida preventiva y para iniciar el proceso sancionador y abrir expedientes en caso de detectar alguna infracción.

Durante el presente año, 46 denuncias han sido interpuestas y un total de 211 expedientes se han abierto por abandono de vehículos en la vía pública por parte de la Policía Local de Sant Antoni.

En el año 2022, se registraron 177 casos y se presentaron 45 denuncias.

Método

Agentes han explicado que la retirada de un automóvil abandonado en la vía pública implica un largo trámite administrativo y legal. Después de ser localizado, se coloca la etiqueta de abandono y se inicia el proceso del expediente.

Si el vehículo continúa en el mismo lugar después de un mes, se procede a su retirada utilizando el servicio municipal de grúa y se transporta al depósito local. Una vez cumplidos los plazos requeridos (un mes desde la notificación, un mes desde la publicación del decreto en el BOE o mediante la renuncia voluntaria del vehículo), se solicita la retirada de los automóviles a un centro de reciclaje, así como la cancelación en los registros de la DGT.

Desde la UMA han recordado que los autos desechados se consideran desechos sólidos urbanos y representan un riesgo al convertirse en un punto de contaminación medioambiental. Han advertido que, en caso de que el vehículo haya alcanzado el final de su ciclo de vida, es necesario desecharlo de manera responsable a través de los centros de reciclaje autorizados.

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