El portavoz del PP en el Parlament, Sebastià Sagreras, ha afirmado con «humildad» que su partido no cuenta con los 30 votos de la mayoría absoluta parlamentaria para aprobar los presupuestos autonómicos de 2024, por lo que era imprescindible contar con el apoyo de Vox.
Sagreras ha señalado que el PP dispone en el Parlament de 25 diputados y, por lo tanto, era necesario «afrontar» una negociación con Vox para sacar adelante los primeros presupuestos autonómicos del Ejecutivo de Marga Prohens. «Han sido semanas de negociación difíciles», pero finalmente PP y Vox han cerrado este acuerdo que prevé la petición del partido de Santiago Abascal de aprobar una partida de 20 millones de euros para la libre elección de lengua en los colegios, y eliminar las ayudas públicas a patronales y sindicatos. El PP, asegura, está «realmente satisfecho» por este acuerdo, ya que Vox es el socio de «investidura» y ambas formaciones coinciden en muchas cosas y en otras mantienen «distintas sensibilidades».
El portavoz popular ha destacado que el presupuesto de la comunidad autónoma ascenderá a 6.365 millones de euros, el más alto que jamás ha tenido Baleares, con un aumento del gasto público de 418 millones, la mayor parte de los cuales irán a sanidad y educación.
La oposición critica la «sumisión» del PP
El portavoz del PSIB en el Parlament, Iago Negueruela, ha lamentado «que el PP va a aceptar todo lo que diga Vox» para contar con sus votos. Negueruela se ha referido a las «capitulaciones» del PP frente a la «extrema derecha» para que Prohens continúe «sentada» en el Consolat de Mar sin programa político alguno, con solo la intención de seguir gobernando.
El político socialista ha lamentado que el Ejecutivo del PP haya «desdeñado» un posible acuerdo con los partidos de la oposición para aprobar un presupuesto «técnico, de Estado», para salir de una situación en la que al PP le faltan apoyos en el Parlament. «Ya tenemos la segregación escolar que quería Vox» con la aprobación de una enmienda parcial de 20 millones para la libre elección de lengua en los centros, que en opinión de Negueruela supondrá «la ruptura social en las escuelas». La postura de Vox es «blanco o negro, aceptas o no aceptas, y el PP está aceptando todo, no hay más».
También Més per Mallorca ha lamentado que, al final, el PP termine pactando los presupuestos autonómicos de 2024 con Vox, en una actitud que ha calificado de «sumisión total a las exigencias, chantajes, obsesiones, quimeras y fobias» del partido de Santiago Abascal en Baleares.
El portavoz parlamentario de MÉS per Mallorca, Lluís Apesteguia, ha señalado que el PP ha rechazado la «mano extendida» de este partido para sacar adelante las cuentas del Govern presidido por Marga Prohens (PP). De manera particular, Apesteguia se ha opuesto a la petición de Vox de que el Ejecutivo apruebe una partida de 20 millones para implantar la elección libre de lengua en los colegios, lo que ha calificado de «segregación lingüística». Esta medida política, ha afirmado, es una «vergüenza» para el PP porque supone «romper» el modelo lingüístico pactado por todos los partidos al inicio del estado autonómico, lo que supondrá también una ruptura de la convivencia.
Por su parte, la diputada de Unidas Podemos, Cristina Gómez, ha denunciado que «el PP se esté dejando llevar por el relato y la estrategia de Vox», lo que se demuestra con este proyecto de «segregación lingüística» que en su opinión es ilegal.