El presidente del Consell de Formentera, Llorenç Córdoba, reconoce que los chiringuitos de la playa necesitan de una resolución y promete dárselas en las próximas semanas. «Creo que hemos llegado a un punto final y mi idea sería si hoy mismo pudiera hacerlo o mañana, pero tenemos que dejar trabajar también en los técnicos. Ahora mismo toda esta información está en los técnicos del Consell y hay de interpretarla«, aclara.
«Ha estado muy complicado, hay muchos intereses, hay gente enfrentada, hay contenciosos, hay denuncias. Esto todo se tiene que estudiar, se tiene que mirar a ver como se funciona», explica Córdoba en declaraciones a los medios. En este sentido, asegura haber escuchado las alegaciones de los concesionarios vigentes como también de los concursantes y que en base a esto estudiarán cada propuesta o argumento para «tomar una decisión en conjunto con todo el Gobierno insular» que «sea lo mejor posible» para Formentera.
Además, recuerda que esta «es una decisión que hace 24 meses que se tendría que haber tomado» pero que, de todos modos, considera que «en unas semanas» se tendrá una resolución final.
La reclamación de los chiringuitos
Los quioscos de las playas de Formentera han pedido la exclusión de los nuevos concursantes porque «presentaron un número muy inferior de trabajadores y trabajadoras a los realmente existen y que tienen la obligatoriedad de contratar» ni contemplan al personal que debe ser subrogado y que eso hace que sus costes sean menor, lo que representa un perjuicio para los antiguos dueños.
«Afecta mucho más que no solo a ocho quioscos de Formentera», admite Córdoba, que lamenta que «los trabajadores no tienen una organización o no tienen un representante» con quien poder hablar al respecto. Respecto a este tema, los propietarios de los quioscos alertan que los aspirantes a la posesión han presentado «una plantilla de cinco trabajadores, cuando en el momento de la licitación eran más del triple«.
