Ignacio del Río Sáez (Madrid, 1978) es el director de activos de Ocean Capital Partner, socio mayoritario (51%) de IGY Marina Ibiza junto a Empresas Matutes (25,5%) y la multinacional IGY (23,5%), líder mundial en grandes esloras, en la concesión del muelle para megayates de La Marina de Ibiza.
Le acompañará en esta aventura prevista para los próximos ocho años y medio Juan Vicente Roselló, ex gerente del Club Náutico de Sant Antoni, como gerente sobre el terreno.
Ocean Capital Partner explota junto a su socio estratégico para España y resto de Europa la marina de megayates del puerto de Málaga, al tiempo que aspira a gestionar nuevas oportunidades en España. Ello sin perder las otras dos patas de su negocio: la consultoría y la explotación de terminales marítimas, lo que incluye la gestión de los edificios que funcionan como estaciones marítimas y los muelles aparejados.
En la entrevista celebrada el pasado jueves, Del Río y a Roselló nos adelantan sus planes de presente y futuro para los muelles de megayates. La idea de abrir un restaurante en edificio de El Martillo del que tienen la concesión, instalar cerramientos para garantizar la seguridad y privacidad de los usuarios y de cambiar el pavimento forman parte del pasado.
Su objetivo es que haya actividad todo el año, tal como ha reclamado la patronal náutica de la Pimeef en sus alegaciones al Plan Especial del Puerto de Ibiza.
-¿Hay tiempo para novedades de cara a la próxima temporada?
-No mucho porque la concesión se autorizó hace un par de semanas. Estamos entusiasmados ante el reto que tenemos, pero desgraciadamente no podemos plantear obras a estas alturas. Buscaremos dar el mejor el mejor servicio y trataremos de empezar a trabajar en la integración puerto y ciudad, aspecto en el que somos expertos…
-Perdone que le interrumpa, pero me da la sensación de que no hay que hacer gran cosa para integrar el muelle de grandes esloras de Ibiza con la ciudad porque físicamente ya están muy integrados de forma natural.
-No se trata de hacer obras, sino de hacer cosas que sean buenas para el barrio porque necesitamos que ellos estén con nosotros. Por este motivo, nos hemos reunidos con comerciantes y vecinos, junto al director de Autoridad Portuaria en Ibiza (Ignacio Revilla).
Estamos elaborando un calendario de eventos para 2024, en el que habrá un proyecto de concienciación medioambiental, queremos traer una regata… Queremos dar vida a La Marina porque necesitamos tener la ciudad detrás de nosotros. No queremos hacer el agosto y queremos que la temporada sea lo más larga posible. Conseguir ese tráfico no se conseguirá de la noche a la mañana porque atraer tráfico fuera de junio a septiembre costará. Pedimos un voto de confianza y paciencia.
-¿Qué regata organizarán?
-Intentaremos que sea fuera de temporada. Son eventos muy interesantes, que mueven mucha gente y son un espectáculo que dinamiza.
-De cara a 2025, ¿qué cambios sufrirá la marina?
-El principal no se ve: es el suministro eléctrico. No se trata de una cuestión estética y de quitar los cables que distribuyen la electricidad que generamos con un generador. Ambientalmente es muy importante facilitar conexión eléctrica a este tipo de barcos de grandes eslora porque consumen mucho combustible al cabo del día. Además, los motores hacen ruido. Y no nos podemos permitir el lujo de que un barco esté con los motores arrancados todo el día. Los pequeños, de 20 ó 25, están conectados al generador, y tampoco es el escenario ideal.
-¿Desposiciona a la marina carecer de suministro eléctrico?
-Por supuesto. Cada vez nos pasa con mayor frecuencia que los capitanes nos preguntan si se pueden conectar a la red eléctrica y si no se pueden conectar, no atracan.
-¿Por concienciación medioambiental o por coste?
-Un poco por todo. Quemar combustible durante todo el día no es la mejor idea. Y es un requisito que, cada vez más, le ponen los dueños a los capitanes.
-¿Cuál es la inversión de la nueva acometida eléctrica?
-Muy grande. De los 4,8 millones de euros de inversión a la que nos hemos comprometido, más de la mitad es para el suministro eléctrico.
-¿La red está dimensionada?
-Sí. Lo hemos hablado con Endesa y no hay problemas. La nueva línea es buena para la ciudad porque mejora la distribución eléctrica.
-¿Y la otra mitad de la inversión?
-Las torretas para que se puedan conectar los barcos requieren una inversión importante. También cambiaremos los trenes de fondeo y habrá una intervención muy importante en los duques de alba porque está dañados estructuralmente.
-¿También se encargarán de buscar cruceros para el muelle del Muro?
-No. Estamos obligados a ceder ese muelle 50 días al año a Autoridad Portuaria. Nosotros buscaremos barcos de 100, 120 y hasta 140 metros para ese muelle.
-¿Supone una ventaja competitiva para la concesión disponer de ese muelle?
-Sí. No vienen muchos barcos grandes a Ibiza porque no tienen sitio para atracar y cuando vienen acaban fondeando fuera, con el riesgo y la incomodidad que supone. Nuestra ventaja es que podemos ofrecerles a los armadores un amarre en una marina enclavada en el centro de la ciudad que dispone de conexión con la red de suministro eléctrico a los pies de un entorno declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. La baza comercial es muy clara. Va a ser difícil que nos digan que no. No hay que convencer a nadie para que venga a Ibiza en verano. El reto es convencerles de que en invierno y el resto del año también se puede estar muy bien.
-¿Hacen falta más muelles de este porte para supergrandes esloras en Ibiza?
-La realidad es que la tendencia que vemos en los barcos que están en astilleros es al gigantismo. Barcos cada vez más grandes, con esloras y mangas más grandes. Las antiguas marinas están empezando a sufrir para meter barcos de este tipo, porque pierden muchos amarres para meter este tipo de barcos.
-¿Parece ideal su concesión para habilitar más amarres de este tipo?
-Sí. Pero es otro modelo de negocio diferente al de ahora. En un puerto tiene que haber de todo y cabemos todos.
-¿Qué van a hacer finalmente en el edificio del Martillo?
-Vamos a hacer una cafetería completamente abierta. Habrá una pequeña barra donde nuestros clientes podrán tomarse un café. Hemos de dignificar la zona.
-¿No parece un gran negocio?
-Es que no es nuestro negocio y nosotros no nos dedicamos a ello. Nosotros lo que queremos es que el entorno sea el mejor posible. Ahora hay hasta gente que duerme por la noche y eso es lo que queremos evitar. La imagen es muy importante. No nos ayuda que los clientes vean cómo está ahora, sucio, con pintadas, roto…
-¿Qué servicios en tierra necesitan sus clientes?
-Un barco de 60 metros o de 100 metros no necesita duchas, ni nada en tierra porque son muy grandes y autónomos. Lo que nos piden es una ciudad para vivir. En invierno no está el propietario, pero sí el capitán y las tripulaciones. Tienen hijos y las familias han de vivir en algún sitio.
Los servicios de tierra que nos pidan los prestaremos a través de las agencias especializadas de aquí que tienen mucha experiencia y lo hacen muy bien.
-¿Suena a reto importante lo que está planteando del invierno en La Marina?
-Para eso hemos fichado a Juan Vicente Roselló, para diseñar buenos planes con los que poder para fidelizar a nuestros clientes. Es necesario un esfuerzo conjunto, entre el barrio, la ciudad, el Ayuntamiento, Autoridad Portuaria y todo el mundo apoyar para alargar la temporada. Traer clientes en invierno si está todo cerrado es complicado cuando hay ciudades con más vida.
-¿Málaga y Palma parten con ventaja en este sentido?
-Yo no he comparado a Ibiza con ninguna ciudad. Está claro que son modelos de éxito a seguir. A Ibiza le vendría bien alargar la temporada.
-¿Qué piensan hacer?
-Desde la marina de Málaga conseguimos cerrar dos vuelos directos, uno con Nueva York y otro con Boston, y ahora estamos trabajando en otro vuelo directo con Miami.
-¿Qué impacto tendría para su negocio un vuelo directo entre Ibiza a Estados Unidos?
-Muy alto. Este tipo de barcos cuentan con tripulaciones de hasta 60 personas, que no suelen ser de la Unión Europa. Y no es lo mismo decirle al armador que puede traer sus tripulaciones en vuelo directo que sin él. Este es un ejemplo de lo que podemos hacer. Un vuelo directo beneficiaría a todo el mundo. Y se puede hacer.
-Eso depende de muchos factores y no es la primera vez que se intenta sin éxito. ¿Qué más?
-(Juan Vicente Roselló). Todo el año es muy complicado. Preferimos hablar de objetivos alcanzables, es decir, estirar la temporada desde 1 de abril hasta noviembre. Para conseguir eso, necesitamos que haya gente y el barrio ha de estar abierto.
-¿El usuario de sus barcos necesita un barrio? Siempre me he imaginado que hay un coche esperándoles y que les lleva a donde quieren.
-(JVR) Siempre pensamos en el armador y los invitados. Pero, como le he dicho hay barcos con 50 tripulantes. Si logramos 10 barcos, estamos hablando de 500 personas por ejemplo. Es un volumen importante. Y la ciudad hace un efecto llamada. Todo ayuda, el suministro eléctrico, el ambiente, que puedan aprovisionarse bien… Ahora mismo, nuestro primer objetivo, no obstante, es atraer a una docena de embarcaciones de entre 20 y 40 metros.
-¿Un megayate inverna o se va al Caribe?
-Muchos se van al Caribe, pero muchos no. Y tanto aquí como en el Caribe son temporadas cortas, de mes y medio como máximo. Necesitan una marina para invernar el resto de meses. Nuestro objetivo es que el barco que quiere venir en verano no solo esté en verano sino que venga de abril a noviembre. Y si no va al Caribe, que se quede todo el año.
-¿Necesitan vivienda para los tripulantes si hacen de Ibiza el puerto base?
-Algunas tripulaciones lo piden. Pero no es nuestro negocio, nosotros intentamos facilitarle las cosas.
-¿Qué papel juega Empresas Matutes en el proyecto?
-Un papel fundamental. Son socios inversores que cuentan con una elevada reputación en Ibiza. Estamos encantados de tenerles con nosotros. Tiene todo el sentido dentro de nuestro plan. Nosotros somos una compañía española, con capital ibicenco, no somos una multinacional rara.
-¿Aprovecharán las sinergias con los negocios de lujo de Empresas Matutes?
-Por supuesto.
-¿Es importante el precio en su negocio?
-No queremos una guerra de precios. Pero para posicionarnos no podemos pedir una tarifa demasiada elevada. Y la máxima está autorizada por Autoridad Portuaria.
