La Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM) ha expresado su respeto a la libertad de expresión en el marco de las manifestaciones contra la masificación turística realizadas en Palma el pasado domingo, aunque señalan que les «llama la atención el activismo y el despertar de colectivos que no se han pronunciado hasta ahora, cuando la situación es la misma de los últimos años».
FEHM considera que «la crítica constante al turismo, principal actividad económica y motor que sustenta la mayor parte del empleo en Mallorca no es constructiva, ni contribuye a una transformación en positivo para seguir evolucionando. En este sentido, llama la atención el activismo y el despertar de colectivos que no se han pronunciado hasta ahora, cuando la situación es la misma de los últimos años«, indican precisamente.
«Desde La FEHM llevamos mucho tiempo reclamando mayor control por parte de las instituciones y una gestión del siglo XXI, con el uso de la tecnología y actuaciones a corto, medio y largo plazo, más allá de la creación de la Mesa para el Pacto Social de Sostenibilidad que compartimos y en la que por supuesto participaremos activamente», agregan.
La patronal empresarial asegura que la falta de control sobre el alquiler turístico ilegal «que no contribuye, ni paga impuestos y priva al residente de acceso a la vivienda, así como del crecimiento desmesurado de las más de 92.000 plazas de alquiler turístico en los últimos ocho años» son algunas de las causas de este problema.
También señalan la existencia de «una red de transporte público deficiente y unas infraestructuras viarias y aparcamientos insuficientes y sin dimensionar, teniendo en cuenta un aumento del 40 por ciento de la población en los últimos 20 años», según informa Mallorca Diario.
«Desde la FEHM respetamos profundamente la libertad de expresión y las manifestaciones que se convocan en base a la normativa vigente y desarrollan sin incidentes, sin que ello tenga que suponer un menoscabo hacia los derechos de los propios turistas coincidentes durante el recorrido, ni ataques personales, ni contra instalaciones, como los que se produjeron en algunos momentos en el marco de la manifestación. Sirvan de ejemplos, las pintadas en fachadas de algunos establecimientos hoteleros de Palma y que obedecen a acciones vandálicas que desaprobamos absolutamente», afirma el gerente de la federación, María José Aguiló.
«Respetamos las manifestaciones cívicas, condenamos el vandalismo y las actividades ilegales del tipo que sean, y por supuesto, tal y como avala nuestra trayectoria, nos ofrecemos a seguir trabajando a favor de medidas que mejoren la calidad de vida de los residentes, un colectivo del que también formamos parte», ha concluido.