El Departamento de Ordenación Turística y Lucha contra el Intrusismo del Consell Insular de Ibiza ha impuesto una multa por de 87.000 euros a una empresa de alojamiento turístico que gestiona un bloque de apartamentos en Cala Llonga. Se trata de una cuantía que incluye varias sanciones detectadas por los servicios de inspección del Consell.
La primera sanción grave, por importe de 4.001 euros, es por incumplir las obligaciones de comunicación o de información con la administración turística competentes, y otra muy grave, de 70.000 euros, por realizar actividad turística sin haber presentado la correspondiente declaración responsable de inicio de actividad turística o comunicación previa.
Además, posee otra sanción, de 10.000 euros, al no mantener el establecimiento en correctas condiciones de higiene y limpieza, así como el correcto estado de funcionamiento de los mecanismos, equipos e instalaciones de que disponen. Esta situación se detectó tanto en las zonas comunes exteriores de paso de los clientes donde había deterioro del mobiliario, manchas de humedad, suciedad acumulada, etc, y también se encontró en el interior de las unidades de alojamiento.
También han caído sobre este empresario tres sanciones leves, de 1.000 euros cada una, por no exhibir los distintivos acreditativos del grupo y categoría del establecimiento, por no dar publicidad de las normas turísticas y por obstaculizar la labor inspectora.
El titular del establecimiento amplió las unidades de alojamiento de 114 a 208, con el evidente aumento de plazas, sin la preceptiva comunicación previa de modificación de datos. Tampoco declaró el cambio de grupo de apartamentos a hotel-apartamentos, puesto que en 131 de las 208 unidades de alojamiento no hay cocina.
