El Ayuntamiento de Santa Eulària ha confirmado que solo dos familias han solicitado ayuda para alojamiento tras el desalojo del asentamiento de Can Rova, ejecutado hoy bajo orden judicial.
Este operativo, supervisado por la alcaldesa Carmen Ferrer y los concejales de Servicios Sociales y Policía Local, ha resultado en el desalojo de aproximadamente 150 personas, incluidos niños.
El desalojo de Can Rova, programado inicialmente para el 10 de julio pero pospuesto por motivos procesales, responde a un litigio familiar entre seis hermanos. Cinco de ellos demandaron al sexto por la explotación ilegal de la finca heredada, lo que llevó a la intervención judicial. El asentamiento, que se había convertido en un campamento ilegal, albergaba a numerosas familias que pagaban alquileres por infraviviendas.
Desde primeras horas de la mañana, un dispositivo policial, que incluyó a 12 agentes y el uso de drones, se desplegó en la zona para ejecutar la orden de desalojo. La operación estuvo marcada por momentos de tensión, con algunos residentes resistiéndose a abandonar el lugar debido a la falta de alternativas habitacionales.
Despliegue del Ayuntamiento
Durante el desalojo, los servicios sociales del Ayuntamiento desplegaron un equipo de tres trabajadoras sociales y una educadora social para coordinar la asistencia a las familias afectadas.
La concejala de Servicios Sociales, Antonia Picó, destacó que durante las últimas semanas se estuvo en contacto con 13 familias del asentamiento, brindándoles información y apoyo preventivo.
“Ayer ayudamos a una familia a pagar la entrada a una nueva vivienda, y hoy otra familia ha solicitado la misma asistencia. No hemos recibido más peticiones, lo que indica que nuestro trabajo preventivo ha sido efectivo y que algunas familias han encontrado soluciones por su cuenta”, explicó Picó.
Además, una técnica de Bienestar Animal y personal del Servicio de Recogida y Acogida de Animales de Santa Eulària se desplazaron al lugar para hacerse cargo de las mascotas que pudieran quedar tras el desalojo. Dos animales, un perro y un gato, fueron atendidos durante el operativo.
Ayudas del Consell
Desde el Consell de Ibiza le confirmaron a La Voz de Ibiza que se están valorando casos de vulnerabilidad social de los desalojados, pero que hasta el momento ninguno le ha solicitado ayudas directamente.