El Partido Popular (PP) sigue sin confirmar si apoyará la destitución del presidente del Parlament, Gabriel Le Senne, durante el pleno extraordinario que se celebrará el 3 de septiembre.
Esta votación, que se llevará a cabo dos meses y medio después de la presentación de la moción y una semana antes del inicio del periodo ordinario de sesiones, ha generado un intenso debate político.
La Diputación Permanente acordó por unanimidad la convocatoria del pleno extraordinario, aunque la oposición ha mostrado su descontento con la fecha seleccionada. La izquierda acusa al PP y a Vox de utilizar este tiempo para «negociar» y ha desafiado a ambos partidos a celebrar el pleno en agosto.
Gabriel Le Senne justificó la elección de la fecha argumentando que, por las gestiones realizadas, era mejor mantener la fecha planteada. Sin embargo, este anuncio ha sido recibido con críticas, especialmente de los representantes socialistas en la Mesa, quienes votaron en contra.
La oposición, liderada por figuras como Josep Castells de Més per Menorca, vincula el retraso en la votación con el estado actual de las relaciones entre el PP y Vox. Castells señaló que el PP está considerando el costo político de romper con Vox por completo y está evaluando las posibles repercusiones de no apoyar la destitución de Le Senne.
El portavoz del PP, Sebastià Sagreras, ha declarado que será en septiembre cuando el Grupo Parlamentario Popular defina el sentido de su voto. Esta moción de censura necesita el apoyo del PP, ya que una abstención no sería suficiente para destituir a Le Senne.
Sagreras reiteró que el incidente que originó la solicitud de destitución, relacionado con la polémica foto de las ‘Roges del Molinar’, fue una actitud errática y desafortunada por parte de Le Senne, quien ya pidió disculpas. Sin mencionar explícitamente su voto, Sagreras insinuó que el pleno extraordinario podría servir para pasar página de este capítulo, que nunca debió ocurrir.
En cuanto a las relaciones con Vox, Sagreras afirmó que el PP está a la espera de alguna reflexión por parte de su antiguo socio, pero aseguró que la situación en Baleares no cambia significativamente, ya que el PP seguirá gobernando en solitario.
Crítica de la oposición
La izquierda, por su parte, ha acusado al PP y a Vox de utilizar el tiempo para «negociar» y ha instado a ambos grupos a celebrar el pleno lo antes posible. Iago Negueruela, portavoz socialista, criticó la sugerencia del PP de que la oposición había pospuesto el debate para tomar vacaciones, y retó a Sagreras a elegir cualquier día de la próxima semana para celebrar el pleno.
MÉS per Mallorca también expresó su frustración, criticando a Le Senne por haber impedido el debate sobre su remoción y describiendo la gestión del calendario como una burla al reglamento del Parlament.
