La tensión política sigue aumentando en el Consell de Formentera, donde los grupos Sa Unió, Gent per Formentera y el PSOE votaron en contra de la celebración del pleno extraordinario convocado de urgencia por el presidente, Llorenç Córdoba.
Las tres formaciones han exigido que el orden del día incluya el informe elaborado por la Comisión Ética y Buen Gobierno sobre la crisis institucional que afecta a la isla, algo que, según sostienen, Córdoba sigue evitando.
El conseller socialista Rafa Ramírez destacó que tanto el reglamento del Consell como el Real Decreto sobre el funcionamiento de entidades locales establecen que se deben incluir en las sesiones todos los expedientes que hayan sido concluidos y enviados a Secretaría. Ramírez recalcó que el presidente no estaba cumpliendo esta normativa al no presentar el informe de la Comisión Ética.
Por su parte, José Alcaraz, conseller de Sa Unió, criticó abiertamente la postura del presidente, refiriéndose a Córdoba como “Don Erre que erre” por su negativa a hacer público el informe.
La defensa de Córdoba
Córdoba defendió su decisión explicando que el informe no ha sido finalizado, ya que aún se deben atender las alegaciones recibidas. El propio presidente insular ha recusado a dos de sus cinco miembros y pide que se deje sin efecto el informe.
También ha mencionado que, en repetidas ocasiones, había solicitado la celebración de un pleno ordinario sin incluir este asunto en el orden del día, argumentando que el contenido del pleno es competencia del presidente, quien toma las decisiones «asesorado» por el secretario del Consell. Además, Córdoba subrayó que la sesión incluía temas «muy importantes» que debían tratarse sin demora.
La situación provocó un receso en el pleno, durante el cual se intentó llegar a un acuerdo para una posible sesión alternativa. Sin embargo, la negativa de los grupos políticos mantuvo sus posiciones, y finalmente, cuando se votó la urgencia de la sesión, Córdoba fue el único en respaldarla. La mayoría del pleno votó en contra, imposibilitando la celebración de la sesión extraordinaria.
Este bloqueo en el pleno se produce mientras el conseller Artal Mayans se encuentra en Londres por motivos de la World Travel Market, lo que le impidió participar en la votación.
La falta de consenso sobre el informe de la Comisión Ética refuerza el clima de tensión en el Consell, dejando en suspenso los temas urgentes hasta que se logre un acuerdo.