Una preparación de casi un año y un escenario natural hecho a medida. Las condiciones estaban dadas para que el show de drones del último 4 de diciembre en Ibiza fuera un éxito. “El puerto en Ibiza es el mejor escenario: espacio por todos lados, un lugar seguro, una perspectiva perfecta y el reflejo del mar. Todo eso da un plus que otros sitios no tienen”, analiza para La Voz de Ibiza Ernesto Albacete, director comercial de UMILES, la empresa española responsable del espectáculo, del cual participaron 220 drones y que se realizó en conmemoración al aniversario de la ciudad como Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.
Según explica Albacete, el show en Ibiza pertenece a una serie de espectáculos realizadas a lo largo de todo el 2024 en 15 ciudades española que han sido reconocidas como Patrimonio de la Humanidad, con lo cual, la jornada comenzó a planearse en el 2023.
El espectáculo tenía un total de diez minutos y contaba con la misma base en todas las ciudades: solo las últimas tres escenas eran personalizadas. Como la mayor de las Pitusas ha sido uno de los últimos lugares a donde este show ha llegado, el movimiento de los drones estaba más que aceitado.
El proyecto se trabajó junto con la Concejalía de Cultura y Patrimonio del Ayuntamiento de Ibiza. Junto a ellos se acordó un lugar apropiado, por seguridad y estética, y cuáles serían las tres escenas específicas para Ibiza que tendría el show: Catedral de Dalt-Vila, Logo 25 Aniversariom y Payesa Ibicenca.
“Sabemos, gracias a redes sociales y a la devolución que nos ha dado el Ayuntamiento que el show ha gustado muchísimo”, cuenta Albacete. No es, claro, la primera vez que UMILES despliega sus drones por la isla. “En la temporada de verano hemos tenido mucho trabajo en Baleares”, aclara.
Cómo funcionan los 220 drones
Cuando Albacete comenta que en un espectáculo como el de Ibiza participan unos 220 drones, tiene que aclarar que “no es que tenemos un piloto por dron”. Para manejar el “enjambre” se necesitan dos operadores, quienes controlan los ordenadores con los cuales los drones tienen varios puntos de conexión. “Por un lado, están conectados por GPS. También tenemos una antena RPK, que brinda precisión, y una antena de WiFi. Esta última brinda telemetría para saber el nivel de batería, el posicionamiento de los drones y nos permite saber así si todo está en orden. Por ejemplo, si un dron se queda sin batería, lo advertimos y podemos sacarlo del enjambre”, explica Albacete.
Además de los dos operadores, hay otras cuatro personas que observan el funcionamiento del show para detectar posibles problemas.
Más allá de la seguridad que brinda el software, shows de esta magnitud requieren de distintos ensayos una vez que se ha diseñado y aprobado el guion y se han cargado las animaciones. En el caso de un show totalmente nuevo, se requieren de dos a tres prácticas previas.
“En el caso de Ibiza, al ser un show casi igual al de otras ciudades Patrimonio de la Humanidad, ya estaba todo muy ensayado. Pero sí que cuando vamos a un nuevo sitio hacemos una visita técnica para descartar que influya el magnetismo del sitio o que haya inhibidores.
Una alternativa más cuidada
Al margen de la espectacularidad de un show con tantos drones, hay otros aspectos que explican la buena recepción que el público ha tenido. Albacete destaca que “estos sistemas no hacen ruido”, a la vez que “respetan al medioambiente, a personas sensibles —como quienes están dentro del espectro autista— y a los animales”.
“Eso, a la gente le gusta mucho”, señala el representante de UMILES.
En esa línea, en época navideña los espectáculos con drones asoman como una alternativa más sustentable a la tradicional pirotecnia. No por nada, la compañía trabaja con tres tipos de shows distintos (con 120, 150 y 220 drones respectivamente) en diferentes ciudades de España con temática navideña (ninguno de ellos en la zona de Baleares).
Sobre UMILES
UMILES tiene una fuerte presencia tanto en España como en Chile (cuentan con una sede en la ciudad de Santiago), además de hacer shows esporádicos en otros países como Portugal, Cuba, México o Dinamarca.
En España, la mitad de sus clientes corresponden al ámbito público y la otra mitad al privado.
Actualmente la compañía tiene 35 personas en su plantilla.
UMILES ha ayudado a impulsar aumentos en el número de drones permitidos por la legislación española. Recientemente ha sido la primera en recibir un permiso para espectáculos con 1.000 drones, algo que ensayan para la segunda mitad del 2025.