El Juzgado de Instrucción Número 4 de Ibiza decretó el sobreseimiento provisional del presidente del Consell de Ibiza, Vicent Marí, en la causa «La Vida Islados”, al considerar que la contratación por vía de emergencia de una campaña publicitaria en 2020 estaba jurídicamente justificada debido a la situación de crisis turística en la isla.
En el auto judicial, se determina que Vicent Marí no cometió delito de prevaricación, tráfico de influencias y coacciones a la entonces viceinterventora María Ana Tur Díaz, según ha informado esta mañana Periódico de Ibiza.
Para el juez, “la utilización de la figura del contrato de emergencia era una opción jurídicamente posible y defendible” y explica que «la situación de hundimiento turístico de la isla es una modalidad amparada por la emergencia».
Además, ninguno de los testigos “con capacidad técnica y jurídica que han comparecido en esta causa han puesto en cuestión la contratación por vía de emergencia”, según detalla el Periódico de Ibiza a partir del auto del Juzgado de Instrucción.
Por su parte, el PSOE no realizó ninguna presentación en el Juzgado Contencioso Administrativo.
De qué se trataba la causa
La causa «La Vida Islados» se había iniciado por una investigación sobre la contratación de una campaña publicitaria por parte del Consell de Ibiza.
En 2020, en el contexto de la pandemia de COVID-19, el Consell adjudicó de manera urgente y directa la producción de un video promocional titulado «La Vida Islados» a la empresa Fuera de Escena Ibiza SL, con un coste aproximado de 250.000 euros.
Esta decisión generó sospechas de irregularidades y posibles delitos de prevaricación, tráfico de influencias y coacciones, lo que llevó a la intervención de la Fiscalía Anticorrupción y a la apertura de una investigación judicial.
El proceso legal incluyó declaraciones de diversas partes, entre ellas la interventora del Consell, María Ana Tur Díaz, quien afirmó haber sufrido situaciones de acoso y coacciones relacionadas con la campaña.
Por su parte, Vicent Marí negó cualquier delito y calificó el proceso como un «montaje del PSOE».