La Policía Local de Ibiza ha anunciado la incorporación de un dinamómetro VMPs, un dispositivo diseñado específicamente para detectar modificaciones ilegales en los patinetes eléctricos. Este aparato permitirá a los agentes controlar si estos vehículos de movilidad personal (VMP) cumplen con los límites de velocidad y potencia, establecidos en un máximo de 25 km/h y 1.000 vatios, respectivamente.
El dinamómetro comenzará a usarse en campañas de control que «pronto» se desplegarán en la ciudad. La medida responde al creciente uso de patinetes eléctricos en Ibiza, así como a las preocupaciones por su seguridad, tras observarse un aumento en la circulación de modelos trucados que pueden convertirse en un riesgo para peatones y conductores.
«Vamos a comprobar que todos los patinetes circulen dentro de los límites legales y sin ‘trucos’ que los conviertan en balas sobre ruedas», ha indicado la fuerza de seguridad en su cuenta oficial de Instagram.
Cómo funciona el dinamómetro VMPs
El dinamómetro es un dispositivo portátil homologado que permite realizar pruebas rápidas en tiempo real para determinar las prestaciones técnicas de un patinete eléctrico. Una vez conectado al vehículo, mide parámetros como la velocidad máxima y la potencia del motor. Si los resultados superan los límites legales, el dispositivo emite un informe técnico válido como prueba en procedimientos policiales o administrativos.
Esta tecnología ya ha sido utilizada en ciudades como Valencia, donde se emplea para sacar de circulación a los patinetes eléctricos modificados. Según las autoridades, muchos de estos vehículos trucados pueden alcanzar velocidades superiores a los 50 km/h, representando un peligro significativo en entornos urbanos.
En caso de detectar irregularidades, la Policía podrá inmovilizar el patinete y aplicar la multa correspondiente. Además, el propietario deberá adaptar el vehículo a la normativa antes de poder volver a utilizarlo.
La normativa de patinetes eléctricos en Ibiza
En el municipio de Ibiza, la normativa establece que los patinetes eléctricos no pueden superar los 25 km/h y deben circular exclusivamente por carriles bici o calles peatonales, donde la velocidad máxima permitida es de 10 km/h.
Está prohibido transitar por aceras, túneles urbanos, autopistas, travesías y vías interurbanas. El uso del casco es obligatorio, al igual que prendas reflectantes para garantizar la visibilidad.
Otros requisitos incluyen la presencia de un timbre y alumbrado cuando se circula de noche o en condiciones de baja visibilidad. Los conductores de patinetes también deben abstenerse de usar auriculares, dispositivos móviles o cualquier sistema que implique distracción manual. La edad mínima para manejar un VMP en Ibiza es de 15 años.
En cuanto a sanciones, las multas por incumplir la normativa pueden alcanzar los 602 euros. Además, conducir bajo los efectos del alcohol o las drogas puede derivar en multas de hasta 1.000 euros e incluso la inmovilización del vehículo.