Los vecinos del edificio Don Pepe han decidido este viernes encerrarse en el bloque A como medida de presión contra el Ayuntamiento de Sant Josep. Una de las promotoras de la protesta ha solicitado la presencia urgente de medios de comunicación en el lugar y ha alertado de que ya hay seis patrullas policiales desplegadas, con una situación que “va en aumento”.
Una de las vecinas del Don Pepe ha relatado a La Voz de Ibiza lo que están viviendo en un mensaje remitido desde el interior del bloque A: “Hemos salido todos al balcón. La Policía, evidentemente, no nos ha dicho nada. Hemos dejado claro que no pensamos salir y estamos hartos. Nos ha llegado la notificación justo hoy, con renovación de un año, y no sabemos nada de cómo va a ir todo. El tiempo pasa, seguimos igual y estamos muy, muy, muy cansados. Queremos que todo el mundo vea cómo están las casas después de tantos años. Estamos dentro, hay Policía fuera y no sabemos nada más”.
Se estima que al menos 15 personas han regresado a tomar posesión de sus viviendas, en medio de una situación definida como hartazgo.
El conflicto
El conflicto de los Don Pepe se arrastra desde que entre 2020 y 2021 se desalojara a 22 familias tras la declaración de ruina del inmueble. A día de hoy, la incertidumbre sigue marcando el futuro del edificio. En abril de este año se acordó encargar a un técnico independiente un nuevo informe pericial para revisar los dictámenes contradictorios sobre el estado del bloque, pero los resultados aún no han llegado.
Los apartamentos Don Pepe fueron desalojados debido a un supuesto deterioro estructural. Sin embargo, los vecinos han presentado informes que contradicen esta evaluación, incluyendo uno elaborado por una doctora en Arquitectura de la Universidad de Valencia que afirma que «no hay ruina».
Con el paso del tiempo y sin soluciones concretas, los vecinos han pasado de la negociación institucional a una protesta de alto voltaje. El encierro de hoy, acompañado por el despliegue policial, refleja la desesperación de las familias.
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