Alquilar una vivienda en Baleares se ha convertido en una carga cada vez más difícil de asumir para muchas familias. Según datos del portal inmobiliario Idealista, durante el primer trimestre de 2025, los ciudadanos del archipiélago han tenido que destinar de media el 47% de sus ingresos al pago del alquiler, un punto porcentual más que en el mismo periodo del año anterior.
En el caso de la compra de vivienda, el esfuerzo económico ha descendido levemente hasta situarse en el 42% de los ingresos, un punto menos que hace un año.
En Palma, tomando como referencia pisos de dos habitaciones, el porcentaje de ingresos necesarios tanto para alquilar como para comprar se sitúa en el 41%. En la compra, el dato baja dos puntos respecto al año pasado, mientras que en el alquiler se mantiene estable.
A nivel estatal, el esfuerzo medio para acceder a una vivienda se sitúa en el 36% de los ingresos en régimen de alquiler y en el 23% para la compra. Las cifras de Baleares superan ampliamente estos promedios y rebasan con creces el 30% de los ingresos recomendado por los expertos para garantizar una economía doméstica sostenible.
La escasez de oferta y la subida continuada de los precios son, según los analistas, los principales factores que están agravando la situación. «Es innegable que la situación del alquiler es de absoluta emergencia, con una oferta prácticamente inexistente, precios desbocados y una competencia entre familias que excluye cada vez a más colectivos del acceso», advierte Francisco Iñareta, portavoz de Idealista.
Iñareta alerta además de un efecto secundario preocupante: «Esta situación está empujando a aquellas familias que se lo pueden permitir hacia el mercado de compraventa, donde también se arrastra desde hace años una reducción sostenida de la oferta».
Desde el portal inmobiliario insisten en que es urgente aplicar medidas valientes y consensuadas que permitan estabilizar el mercado y poner en marcha una estrategia de recuperación a medio plazo.