Un espectacular accidente de tráfico se produjo este jueves por la mañana en la carretera de Sant Antoni, concretamente en la rotonda situada frente a la discoteca [UNVRS].
El suceso ocurrió en torno a las 08.00 horas, cuando un vehículo de alquiler, un Mini One, perdió el control, derribó la barrera metálica de seguridad y terminó suspendido con las cuatro ruedas en el aire, apoyado sobre otro tramo de guardarraíl.
El coche involucrado en el siniestro ha quedado completamente destrozado, y ha sido calificado como siniestro total. Según han informado fuentes del servicio de grúas, el vehículo atravesó el guardarraíl en una maniobra violenta que terminó con su estructura volcada sobre el armazón metálico.
Por el momento, no se conoce el estado de los ocupantes del vehículo ni su paradero, lo que ha generado cierta inquietud entre los agentes que intervinieron. La Guardia Civil de Tráfico acudió rápidamente al lugar del accidente para ordenar la circulación y preservar la seguridad en la zona mientras se realizaban las labores de retirada.
Intervención de los equipos de auxilio
Al lugar del siniestro se desplazaron dos unidades de Grúas Ibiza, que necesitaron emplear una grúa pluma para extraer el coche de la posición inestable en la que quedó tras el impacto. La operación se prolongó varios minutos y obligó a restringir el tráfico temporalmente en uno de los carriles de la carretera.
