El paso de un frente atlántico asociado a la borrasca Claudia marcará el tiempo especialmente en Galicia, donde se prevén lluvias intensas y persistentes, posibilidad de tormentas aisladas y rachas de viento del sur que afectarán con fuerza a las zonas costeras.
Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), el temporal marítimo también provocará olas de hasta seis metros en el litoral occidental gallego.
El resto del país, con un tiempo más estable
Mientras el noroeste vivirá una jornada de inestabilidad, en el resto de España el ambiente será más tranquilo y estable, con predominio de los cielos despejados.
No obstante, se esperan nubes y lluvias débiles en algunas zonas del área cantábrica, del atlántico y del Sistema Central, además de brumas y nieblas matinales en las montañas de la vertiente atlántica y en la meseta sur.
Las precipitaciones podrían extenderse también hacia el oeste de Castilla y León, el noroeste de Extremadura y partes del Sistema Central, mientras que en el oeste gallego se formarán brumas frontales.
Canarias, próxima en sentir los efectos de la borrasca Claudia

La borrasca Claudia también impactará en las Islas Canarias, aunque lo hará a partir del miércoles, con previsión de lluvias y vientos fuertes. El cielo estará cubierto en las islas occidentales, con probables lluvias débiles, y más despejado en el resto del archipiélago.
Las temperaturas se mantendrán en torno a 24 grados de máxima y 20 de mínima, con viento flojo y brisas suaves, más intensas en zonas altas.
Efectos indirectos en las Islas Baleares:
Aunque el fenómeno meteorológico incidirá con mayor intensidad en el oeste peninsular y el archipiélago canario, las islas de Ibiza y Formentera sentirán los efectos indirectos de Claudia debido a un flujo de aire cálido y seco. En las islas, se espera un aumento significativo de las temperaturas a lo largo de la semana.
Las máximas podrían alcanzar los 24 °C, mientras que las mínimas se situarían en torno a los 18 °C. Este episodio vendrá acompañado de viento del sur moderado a fuerte y de la llegada de polvo en suspensión, lo que generará el fenómeno conocido como calima y enturbiará el cielo, pudiendo producirse lluvias de barro en ciertos momentos, según la AEMET.
En el conjunto de Baleares, la concentración de estas partículas será notable desde la mañana del miércoles, y las previsiones indican que la calima persistirá hasta el viernes, momento en el que la masa de aire cálido y seco comenzará su desplazamiento hacia el este.
Temperaturas más altas y heladas en zonas de montaña
Las temperaturas máximas subirán en la mayor parte del país, salvo en el centro y en algunas áreas del este, donde apenas variarán.
En general, los valores diurnos se situarán entre 18 y 20 grados. Las mínimas también ascenderán, con ligeros descensos en el Mediterráneo y en Canarias.
Las más bajas del día rondarán los 3 grados en León y Cuenca, con heladas moderadas localizadas en los Pirineos.
Los vientos del sur soplarán de manera moderada en la Península y Baleares, más fuertes en el Cantábrico, el Mediterráneo y el norte de la vertiente atlántica, donde se espera mayor intensidad en Galicia.











