Miles de personas llenaron el paseo Lluís Companys de Barcelona desde las primeras horas del día para recibir al expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, quien el pasado miércoles anunció su regreso a España para asistir al pleno en el Parlament donde se pretende investir al candidato socialista Salvador Illa.
Es por ello que el Parlament cuenta con una fuerte vigilancia de los Mossos d’Esquadra, quienes deben cumplir con la orden de detención que pesa sobre Puigdemont por malversación. Desde su partido, Junts, han pedido a sus seguidores que asistan a la ceremonia para que, en caso de que vaya el líder político, eviten su detención.
El paseo se convirtió en un mar de símbolos y cánticos reivindicativos, destacando la presencia de dos pantallas gigantes que repetían un vídeo con un repaso político del expresidente y de otras figuras encausadas como la secretaria general de ERC, Marta Rovira, y el rapero Valtònyc.