El Consell de Ibiza trabaja por estos días en la confección de dos bolsas de plazas turísticas. Pero, lejos de significar un crecimiento en la oferta de alojamientos, estas plazas nacerán “a cero”, tal como ha remarcado el conseller de Ordenación Turística, Mariano Juan.
“Es importante observar que las posibilidades de intercambio y la creación de bolsas temporales de plazas turísticas no suponen ningún aumento de plazas turísticas en ninguna de las islas, dado que toda nueva plaza turística tiene que ir precedida de una o diversas bajas”, reza el Decreto Ley 4/2025, de 11 de abril, contra la oferta ilegal, de medidas transitorias para la oferta, y por la calidad turística de las Illes Balears.
Las dos bolsas son una para plazas hoteleras y otra para alquiler vacacional. Mallorca ya ha creado ambas bolsas. El Consell de Ibiza, en tanto, prevé tenerlas listas “en las próximas semanas”.
En el marco de la creación de estas bolsas, a principios de semana Juan intervino en la primera sesión de la Comisión Interinsular de Coordinación de la Ordenación Turística, que se desarrolló en Palma, junto a partes de las demás islas baleares.
El encuentro, según resumió el conseller de Turismo Jaume Bauzà, sentó las bases de una estrategia “fundamentada en el freno a nuevas plazas turísticas, la excelencia de las ya existentes y los mecanismos para aflorar vivienda de uso residencial a partir de la oferta turística ilegal».
Cómo se conforman las bolsas
Según se detalla en el decreto, las bolsas de plazas turísticas serán temporales, hasta que los consells determinen mediante el Plan de Intervención en Ámbitos Turísticos (PIAT) o el Plan Territorial Insular (PTI) el techo de plazas “fundamentado en un estudio de la capacidad de carga turística de cada isla”.
Mientras tanto, estas bolsas buscarán contener el número de plazas, ya que solo se abrirán nuevas plazas a medida que se den de baja otras. El Decreto Ley 4/2025 contempla que esto se puede dar por tres casos:
- Cuando un establecimiento turístico se da de baja definitiva para llevar a cabo un cambio de uso. En ese caso, se considera el exceso entre las plazas de las que disponía dicho establecimiento respecto “de las que sean inscritas y comercializadas por los nuevos establecimientos de alojamiento derivadas de los supuestos de intercambio entre particulares”.
- Cuando una vivienda comercializada turísticamente es objeto de baja definitiva. Se aplica el mismo criterio: se contempla si hay un excedente entre las plazas que se liberan y las que se ocupen por intercambio entre particulares.
- Cuando hay bajas de oficio, declaradas por la administración competente.
- Las procedentes de bajas voluntarias que se generen a partir de la entrada en vigor del Decreto Ley. En estos casos “se permite que la persona propietaria pueda designar, en el momento de la baja ante la Administración turística, una nueva persona propietaria a los efectos de que esta pueda adquirir estas plazas a los órganos gestores o administraciones turísticas, para ir destinadas a una nueva vivienda comercializada turísticamente, caso en que la persona designada dispondrá del plazo máximo de un mes desde la baja para adquirir las plazas”.
El decreto también aclara que “las plazas turísticas de las bolsas temporales computaran una por una respecto de las plazas turísticas del nuevo establecimiento turístico o ampliación”, tanto para los casos de alojamiento o como de vivienda comercializada turísticamente.
Plazos
El decreto prevía que para el 15 de junio (plazo que se cumple este domingo), se publicara en el BOIB una resolución o acuerdo por parte de cada Consell. Esta resolución debe establecer “los requisitos, las condiciones, el procedimiento, y el precio, si procede, a seguir por los interesados para adquirir las plazas turísticas”.
Recién a partir de dicha publicación en el BOIB, los interesados en adquirir plazas de las bolsas temporales podrán remitirse a las administraciones turísticas y órganos gestores de cada isla.
