La primera jornada de la huelga médica en Baleares, convocada este martes contra la propuesta de Estatuto Marco, dejó 72 operaciones suspendidas, según datos del IbSalut, que también notificó miles de citas y pruebas anuladas en los principales centros sanitarios del archipiélago.
En total, la administración sanitaria cifró en 1.662 las consultas hospitalarias canceladas, además de 207 pruebas radiológicas, 79 diagnósticas y 2.849 visitas de atención primaria, un impacto que el IbSalut calificó de «significativo» en el funcionamiento del sistema.
Un «éxito»
El Sindicato Médico de Baleares (Simebal) destacó el “éxito” del seguimiento durante la primera hora del paro, que situó en un 85% en el ámbito hospitalario y entre el 65% y el 70% en Atención Primaria, una valoración que el sindicato considera un respaldo directo a sus reivindicaciones. Simebal, como publicó recientemente este diario, mantiene abierta la vía de negociación con la Conselleria de Salut.
Algunos servicios registraron una afectación total. Anestesia fue uno de los departamentos con 100% de seguimiento, lo que obligó a reprogramar intervenciones no urgentes. Según el sindicato, la adhesión de los médicos internos residentes (MIR) fue «especialmente significativa» por su “compromiso notable con las reivindicaciones”, un punto que consideran clave para sostener la protesta en los próximos días.












