El Bayern de Múnich vuelve a reinar en la Bundesliga. Tras una temporada de dominio del Bayer Leverkusen, el equipo bávaro ha recuperado el trono con una regularidad implacable, certificando el título a tres jornadas del final. La victoria 2-0 ante el Borussia Mönchengladbach fue discreta en lo deportivo, pero simbólica: supuso la despedida del mítico Thomas Müller del Allianz Arena, tras 25 años de historia en el club.
Es el primer campeonato bajo la dirección técnica de Vincent Kompany, que llegó el pasado verano. Pese a no haber brillado en la Champions (eliminación frente al Inter) ni en la Copa (fuera a manos del Leverkusen), el Bayern dominó la liga con solo dos derrotas en 32 partidos.
Bayern players partying in Ibiza last night until early morning [📸 @BILD] pic.twitter.com/weIimJZdBm
— Bayern & Germany (@iMiaSanMia) May 12, 2025
Una celebración sin ruido… o casi
El título no llegó con la euforia habitual. El Bayern lo dejó escapar la semana anterior en Leipzig con un empate sin alma. La liga se definió finalmente en un restaurante, cuando el Leverkusen no pasó del empate ante el Freiburg. El alirón llegó en una cena, sin estadio ni champagne.
El club, consciente de la imagen que podía dar, canceló un viaje previsto a Ibiza, preparado por los jugadores para celebrar el título. “No es el momento, la temporada aún no ha terminado”, declaró Max Eberl, director deportivo, en Sky. Sin embargo, el viaje no se canceló del todo, solo se pospuso.
13 players made the trip to Ibiza this afternoon: Neuer, Müller, Kane, Goretzka, Gnabry, Guerreiro, Urbig, Pavlović, Stanišić, Dier, Upamecano, Coman and Laimer. Team manager Samuel Geiler travelled with them [📸 @BILD] pic.twitter.com/kwyABBBjwi
— Bayern & Germany (@iMiaSanMia) May 11, 2025
Ibiza, una semana más tarde y con discreción
Con el trofeo ya en las vitrinas y el título consumado, 13 jugadores del Bayern, entre ellos Müller, Neuer, Kane, Goretzka, Gnabry y Coman, volaron en un jet privado a Ibiza para una escapada corta pero intensa. Esta vez, sin alardes en redes sociales, pero no sin testigos: el diario Bild filtró imágenes de los jugadores celebrando en Pacha, entre risas y copas.
No hubo publicaciones oficiales. Todo fue planificado con bajo perfil, pero imposible de ocultar. El equipo vuelve esta semana a Alemania para cerrar la temporada ante el Hoffenheim y preparar su próximo gran reto: el Mundial de Clubes en junio, donde se medirá a Auckland City, Boca Juniors y Benfica en la fase de grupos.
2022: la fiesta anterior que terminó en polémica
La escena no es nueva. En 2022, el Bayern también celebró su título de liga en Ibiza. Entonces, la escapada generó polémica por el mal momento deportivo. El equipo había sido eliminado de la Champions y la Copa, y venía de perder 3-1 ante el Mainz. Aun así, la plantilla organizó un viaje privado a la isla.
Solo unos pocos, como el capitán Manuel Neuer, decidieron quedarse en Múnich. El resto viajó, festejó y volvió al día siguiente a los entrenamientos con la vista puesta en el partido ante el Stuttgart. La crítica no se hizo esperar.
Matthäus cargó contra Nagelsmann
El más duro fue Lothar Matthäus, leyenda del club y comentarista en Sky. “Es totalmente inaceptable, especialmente después de una derrota como esa”, disparó. “Si hubieran ganado ayer, les diría: quedaos en Ibiza tres días. Pero en estas circunstancias, habría cancelado cualquier día libre”, sentenció, apuntando directamente a la gestión del entonces técnico Julian Nagelsmann.
La historia se repite. Aunque este año no hubo escándalo deportivo, sí quedó en evidencia la voluntad del club de controlar la narrativa. Lo que en 2022 fue una tormenta mediática, en 2025 es un viaje filtrado sin escándalo… pero con titulares asegurados.