Baleares ha registrado en 2024 la tasa más baja de contagios por VIH de su historia, un descenso que también se refleja en Ibiza y Formentera, donde se han confirmado 23 nuevas infecciones, según los datos difundidos por la Conselleria de Salud con motivo del Día Mundial del SIDA. La incidencia balear se sitúa en 7,87 casos por cada 100.000 habitantes, la más baja desde que existen registros autonómicos.
La tendencia descendente, que supone un hito epidemiológico sin precedentes en el archipiélago, muestra que la reducción afecta al conjunto de las islas. En el reparto insular, Mallorca concentró la mayoría de casos, mientras que Ibiza y Formentera aportaron una parte significativa del total sin romper la tendencia general a la baja.
Según la Dirección General de Salud Pública, Baleares sumó 97 nuevas infecciones por VIH en 2024, consolidando un descenso que se mantiene prácticamente ininterrumpido desde 2008. La incidencia global, pese a ser la más baja en dos décadas, continúa ligeramente por encima de la media estatal, situada en 6,95 casos por 100.000 habitantes.
Los casos en las Pitiusas
En el caso de Ibiza y Formentera, los 23 nuevos diagnósticos mantienen a las Pitiusas dentro de los patrones epidemiológicos habituales, donde predominan los contagios entre hombres que tienen sexo con hombres y las transmisiones por vía sexual. La franja de edad más frecuente continúa entre los 30 y 49 años, el grupo con mayor presencia entre los nuevos casos registrados en 2024.
La Conselleria de Salud destaca que la evolución balear confirma una caída sostenida desde el máximo histórico de 2008, cuando se detectaron 209 contagios. Desde entonces, con ligeras oscilaciones, la curva ha seguido un descenso continuado que alcanza en 2024 su valor más bajo en 21 años.
Por categoría de transmisión, el 2024 reflejó un reparto similar al de ejercicios anteriores, con 50 casos entre hombres que tienen sexo con hombres y 42 en relaciones heterosexuales. También se notificaron dos casos entre usuarios de drogas por vía venosa y uno por transmisión maternoinfantil, mientras que en dos diagnósticos no pudo determinarse el origen de la infección.
El informe también recoge un aumento de nuevos diagnósticos en mujeres, que pasan de 12 a 22 casos en un año, mientras que los contagios en hombres descienden de 89 a 75. Esta variación, según la Conselleria, se interpreta dentro de la evolución natural de la serie histórica y no altera la tendencia descendente del conjunto del archipiélago.
En cuanto al origen, se mantiene el predominio de los contagios en personas nacidas fuera de España, que representan un 56% del total, dos puntos más que en 2023. Este indicador, según el departamento autonómico, exige reforzar las campañas de acceso a la prueba y de prevención dirigidas a población migrante.
El periodo acumulado 2003-2024 contabiliza 3.325 diagnósticos en Baleares, con predominio masculino (81,8%) y un perfil mayoritario vinculado a prácticas sexuales de riesgo. La Conselleria subraya que el objetivo para los próximos años sigue siendo avanzar hacia el lema marcado este año por el Día Mundial del SIDA: “Cero muertes por SIDA en 2030”.
