La travesía entre Ibiza y Barcelona del pasado domingo por la tarde terminó convirtiéndose en una experiencia incómoda para decenas de pasajeros que se vieron obligados a pasar el trayecto durmiendo en el suelo, al no disponer de butacas ni espacios habilitados para descansar.
Según las imágenes compartidas por los propios viajeros y difundidas por IB3, los pasillos y zonas comunes del buque aparecían llenos de personas acostadas directamente sobre la moqueta o el pavimento, sin acceso a sofás, sillones o asientos suficientes.
No es la primera vez que se registran quejas de sobrecupo y falta de espacio en este tipo de trayectos, especialmente en fines de semana y fechas de retorno masivo.