La presidenta del Govern balear, Marga Prohens, ha confirmado este martes que el Ejecutivo autonómico está analizando la posibilidad de licitar una línea marítima entre Ibiza y Formentera que garantice salidas a primera y última hora del día, especialmente durante el invierno. Se trataría de un concurso sin subvención directa, gestionado por la Autoridad Portuaria de Baleares (APB), que impondría a la empresa adjudicataria la obligación de cubrir los tramos horarios de 05:00 a 06:00 y de 22:00 a 23:00 horas.
El anuncio se produjo durante el pleno del Parlament balear, en respuesta a una pregunta del diputado de Formentera Llorenç Córdoba, del Grupo Mixto, quien alertó de los problemas de conectividad que sufren los residentes al no disponer de enlaces tempranos ni nocturnos. «Garantizar la conectividad es una prioridad de este Govern», señaló Prohens, aludiendo a la necesidad de buscar soluciones alternativas tras el portazo de la Comisión Europea al modelo de ayudas públicas.
Una conexión crucial para los formenterenses
El diputado Córdoba defendió que la ruta marítima es la única conexión posible de Formentera con el exterior y que la falta de horarios extremos impide que los ciudadanos puedan tomar los primeros vuelos desde Ibiza o regresar en los últimos del día. También lamentó que muchos formenterenses deban pernoctar en Ibiza para realizar trámites administrativos, sanitarios o judiciales.
En esa línea, pidió al Ejecutivo que cualquier decisión se tome de manera consensuada con el Consell de Formentera y las empresas navieras. “La ruta debe responder a las necesidades reales de la población”, reclamó.
Replanteamiento tras el rechazo europeo
Este anuncio confirma y amplía la información avanzada por La Voz de Ibiza. Hace dos semanas, este medio ya informó que la APB estudiaba convocar un concurso sin subvención como fórmula viable ante el rechazo de Bruselas al esquema de ayudas públicas.
La Comisión Europea se ha opuesto a la normativa autonómica que preveía apoyar financieramente ciertas rutas marítimas, forzando a las instituciones insulares a replantear el modelo de movilidad interinsular con alternativas que no contravengan las reglas de competencia comunitaria.
Según informó La Voz de Ibiza, el plan es dar la concesión de una línea a dos empresas, las cuales deberán asegurar la conexión en los horarios menos rentables. A cambio de esto podrán operar el resto de la jornada en barcos más beneficiosos, ya que se estima que habría menos conexiones y, por lo tanto, menor coste y mayor ocupación en un trayecto que mueve dos millones de pasajeros al año.
Según datos de la APBm habrá navieras interesadas en el concurso: los trayectos rentables del verano subvencionen los que no lo son, especialmente las conexiones de primera y última hora. Esto permitiría cubrir los horarios de primera y última hora sin subvenciones europeas.