El ex presidente del Gobierno, José María Aznar, aseguró este viernes en Ibiza que España se dirige hacia unas elecciones “prácticamente constituyentes”, en las que los ciudadanos tendrán que elegir si desean preservar la soberanía nacional o asistir a su disolución y ser los últimos españoles de la historia.
Así lo expresó en la Conferencia Política del Partido Popular de Ibiza, celebrada en el Hotel Torre del Mar, en una intervención en la que desplegó un duro diagnóstico del presente político nacional.
Sánchez aguantará la legislatura “porque todavía queda mucho que cobrar”
Aznar afirmó que Pedro Sánchez no convocará elecciones anticipadas porque sus socios “aún no han terminado de cobrarse todo lo pactado”: “Primero fue la amnistía, luego vendrá el cupo y, más adelante, la consulta”, advirtió.
En su opinión, “el Gobierno se mantendrá con la única finalidad de culminar un proceso que amenaza con aniquilar la unidad de España y dinamitar la convivencia constitucional”.
Con ironía amarga, Aznar recordó una cita del expresidente Antonio Maura: “España tiene salida si los españoles dejan de ser espectadores de su propia ruina”. “Esa es la disyuntiva. O aceptamos ser los últimos españoles de la historia, o demostramos coraje”, advirtió.
La sentencia que “convierte al Congreso en una cámara constituyente”
Una de las críticas más duras se dirigió al Tribunal Constitucional, por avalar la controvertida ley de amnistía. Según Aznar, el fallo “no hay por dónde cogerlo” porque permite interpretar que el Parlamento puede legislar sobre cualquier aspecto que la Constitución no haya cerrado explícitamente. “Eso convierte al Congreso en una cámara constituyente sin haberlo votado”, denunció, generando una de las mayores ovaciones de la tarde.
“Estamos ante una crisis existencial, no política”
Aznar volvió a una de sus ideas recurrentes: “España está en una crisis existencial, no política”. Y desarrolló su tesis: “Aquí ya no se discute sobre pequeñas cuestiones de administración. Se está cuestionando la continuidad nacional, la soberanía y la convivencia entre españoles”.
En esa línea, sostuvo que “el actual Gobierno está troceando la soberanía” y que el país corre el riesgo de convertirse en “un conjunto de republiquetas confederadas”.
“Si salta por los aires la Constitución, eso afectará directamente a la convivencia entre españoles. Quien crea lo contrario, está profundamente equivocado”, alertó el expresidente.
“Sánchez es el jefe de la banda que quiere acabar con España”
Sin ambages, Aznar arremetió contra el presidente del Gobierno: “Pedro Sánchez es el jefe de la banda que quiere acabar con España”, acusación que arrancó aplausos entre un auditorio entregado, compuesto por dirigentes del PP ibicenco y figuras históricas del partido como Luisa Fernanda Rudi y Abel Matutes.
Aznar defendió que el Partido Popular debe convertirse en la expresión de una mayoría nacional, más allá de sus propias siglas: “La única alternativa viable es el PP, aunque muchos votantes no se identifiquen partidariamente con nosotros”.
Centralidad, coraje y estrategia
Durante el acto —moderado por la presidenta del Govern balear, Marga Prohens—, Aznar defendió la moderación como la vía más eficaz para frenar la radicalidad: “La centralidad no es ser neutro, es todo lo contrario”.
Y compartió consejos de gobernabilidad con Prohens: “Cuando tengas minoría, compórtate como si tuvieras mayoría. Si tienes mayoría, actúa como si casi tuvieras minoría”. También explicó que su mayoría absoluta en el año 2000 se fraguó gracias a un “proyecto con respaldo popular” y no por el cálculo político.
Finalmente, Aznar recalcó los tres pilares irrenunciables de cualquier proyecto nacional: la Constitución, la unidad y la ley. “Hay quien convierte eso en un problema. Pero un país que no aplica la ley es un país camino a la tiranía”.