El pleno del Ayuntamiento de Ibiza ha aprobado inicialmente el presupuesto municipal para 2026, que asciende a 98,9 millones de euros, lo que supone un incremento del 8,3% respecto a las cuentas del ejercicio anterior. El acuerdo se ha adoptado este jueves 18 de diciembre, durante una sesión plenaria en la que el equipo de gobierno ha defendido unas cuentas marcadas por el endeudamiento cero, el refuerzo del área social y el aumento de las inversiones.
La primera teniente de alcalde y concejala de Recursos Económicos, Gema Marí, ha subrayado que, por tercer año consecutivo, el Área Social volverá a experimentar un incremento del 10%, alcanzando los 7,4 millones de euros. Según ha destacado, el objetivo del presupuesto es “sentar una base sólida para afrontar los retos de futuro de la ciudad” y consolidar áreas clave como el bienestar social, la seguridad, la limpieza y la mejora de infraestructuras.
Uno de los elementos diferenciales de las cuentas de 2026 es que el Ayuntamiento de Ibiza alcanzará el deuda cero, tras la cancelación del préstamo a largo plazo formalizado en 2024 para financiar inversiones. Esta situación permitirá al Consistorio no tener que consignar partidas destinadas a amortización ni a gastos financieros, lo que, según Marí, es fruto de la gestión económica del actual equipo de gobierno.
A ello se suma, por primera vez, la consignación de 4 millones de euros procedentes de la Ley de Capitalidad, gracias al compromiso del Govern balear. Estos fondos se destinarán a gasto corriente para financiar servicios esenciales como la limpieza viaria, el mantenimiento de parques y jardines, la seguridad ciudadana y la conservación de las vías públicas.
Las inversiones se incrementan un 51%
El presupuesto de 2026 también destaca por el aumento de la capacidad inversora. La contención del gasto corriente ha permitido incrementar los fondos propios del Ayuntamiento y, junto con la cofinanciación del Consell Insular d’Eivissa, el Govern balear y los fondos europeos EDIL, alcanzar una cifra total de 11,6 millones de euros en inversiones, lo que supone un 51% más que en 2025.
Dentro de este capítulo, la concejala ha puesto especial énfasis en las políticas de vivienda. Entre las actuaciones previstas figuran la redacción de proyectos estratégicos como un coliving para jóvenes en Sa Campanera, la rehabilitación de viviendas en Dalt Vila y Sa Penya, y la promoción de vivienda juvenil en la avenida Isidoro Macabich, dentro del programa Eivissa Habita. Para 2026 se destinarán 72.000 euros a la redacción de este último proyecto.
Además, a través del Consorcio Eivissa Patrimonio de la Humanidad, se prevé la adecuación del solar UA-2-3 para la construcción de al menos cinco viviendas, y se destina una partida de 326.852 euros para finalizar las obras de tres viviendas y tres recursos asistenciales en la plaza de sa Drassaneta, cuya finalización está prevista para febrero de 2026.
En cuanto a los ingresos, Marí ha advertido de una previsible reducción del 3,9% en la participación en los tributos del Estado, supeditada a la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado. La previsión para 2026 es de 20,9 millones de euros, frente a los 21,8 millones del ejercicio anterior, una circunstancia que la concejala ha atribuido a la falta de nuevas cuentas estatales.
Mejoras laborales y refuerzo de la Policía Local
El presupuesto municipal también contempla mejoras para la plantilla del Ayuntamiento y el refuerzo de la seguridad ciudadana. En este sentido, se ha previsto una dotación de 1,62 millones de euros para la implementación del segundo tramo de la carrera profesional del personal municipal, que alcanzará el 70% a partir del 1 de enero de 2026. Asimismo, se destinan 1,14 millones de euros para financiar 19 nuevas plazas de la Policía Local.
“La solidaridad, la atención a los más vulnerables y la seguridad ciudadana serán ejes fundamentales de la gestión del próximo año”, ha concluido Marí, quien ha defendido que el presupuesto de 2026 representa la culminación de los proyectos prioritarios del mandato y tiene como objetivo último mejorar el servicio público y la calidad de vida de la ciudadanía.
