A partir del 21 de abril y hasta el 12 de mayo, los músicos y artistas callejeros que quieran actuar en las calles de la ciudad de Ibiza deberán solicitar una licencia específica al Ayuntamiento. Así lo ha anunciado el Consistorio tras llegar a un acuerdo con la Asociación de Músicos de Ibiza para regular las actuaciones en el espacio público mediante un nuevo decreto municipal que estará vigente hasta diciembre.
Las actuaciones solo estarán permitidas en 20 ubicaciones concretas, distribuidas entre Dalt Vila, La Marina, el Puerto y ses Figueretes, y deberán respetar un estricto régimen de horarios para evitar molestias al vecindario.
Los artistas podrán actuar de lunes a jueves y domingos, entre las 19.00 y las 22.00 horas. En cambio, los viernes, sábados y vísperas de festivo, las actuaciones estarán permitidas en dos franjas: de 12.00 a 15.00 y de 20.00 a 23.00 horas, siempre con la condición de que no generen molestias acústicas.
Actuaciones acústicas, sin repetición y con rotación obligatoria
Entre las principales novedades del decreto figura la prohibición de repetir actuación en una misma ubicación, lo que obligará a los artistas a rotar por los diferentes puntos. Cada intervención tendrá una duración máxima de 60 minutos, tras los cuales deberán retirar el equipo y cambiar de localización.
Solo se permitirán actuaciones en acústico. Se prohíbe expresamente el uso de amplificadores, así como de instrumentos considerados potencialmente molestos como tambores, platillos, cornetas, baterías sin silenciador o trompetas sin sordina.
Multas de hasta 2.000 euros por incumplimiento
El nuevo reglamento establece un régimen sancionador que clasifica las infracciones como leves, moderadas o graves. Las multas oscilan entre los 100 y los 2.000 euros, en función del tipo de incumplimiento. También se reforzará la vigilancia sobre el uso del espacio público y el cumplimiento de las condiciones de convivencia vecinal.
Para optar a la licencia, los artistas deberán acreditar ciertos requisitos administrativos: estar dados de alta en la Seguridad Social, presentar un seguro de responsabilidad civil, abonar la tasa de ocupación de la vía pública y aportar información sobre su formación musical, un aspecto que será valorado por el Ayuntamiento a la hora de conceder los permisos.
Una ciudad con vida cultural más allá del verano
El concejal de Comercio y Mercados, Álex Minchiotti, ha señalado que esta regulación busca preservar el equilibrio entre la actividad cultural y el descanso vecinal, al tiempo que convierte la ciudad en un espacio dinámico también fuera de la temporada alta.
“El arte en las calles acompaña a que la ciudad siga viva y dinámica”, afirmó, subrayando que el objetivo es que Ibiza mantenga su atractivo también más allá del verano.