Esta semana, los clientes que han acudido a las carnicerías de Ibiza en busca de cerdo o pollo local se han encontrado con un mensaje claro: no hay producto de la isla. La ausencia de carne autóctona ha obligado a los carniceros a recurrir a proveedores de la Península, un cambio que, aunque temporal, no ha pasado desapercibido entre los compradores.
Un problema técnico en el matadero, la causa de la escasez
El origen de esta situación se encuentra en el matadero de la isla, donde se ha llevado a cabo el cambio de una antigua caldera con más de 20 años de uso. Aunque la nueva instalación ya está lista, la falta de técnicos disponibles para su puesta en marcha ha retrasado su funcionamiento hasta el lunes próximo, cuando se espera que el suministro de pollo y cerdo local vuelva a la normalidad.
Mientras tanto, las carnicerías, como las del Mercat Nou, han tenido que adaptarse a la situación. Juan Carlos Castillo, de la Carnicería Juan Carlos, explica que han optado por ofrecer pollo rojo de la Península. “No tiene nada que ver con el de aquí, pero tampoco es malo”, comenta en declaraciones a IB3.
Clientes resignados ante la falta de carne local
Para muchos consumidores, la prioridad sigue siendo comprar producto local, pero ante la falta de opciones, se han visto obligados a aceptar la situación. “Preferiría que fuera de aquí, pero ¿qué podemos hacer? Hay tantas cosas que compramos que vienen de fuera”, señala una clienta del mercado.
El problema no se alargará mucho más. Si todo sigue según lo previsto, el lunes la caldera estará en funcionamiento y las carnicerías de Ibiza volverán a contar con cerdo y pollo de producción local. Hasta entonces, los carniceros y clientes se lo toman con filosofía, a la espera de recuperar el sabor y la calidad del producto de la isla.