Ubicado en el corazón rural de la isla, Can Lluc Boutique Country Hotel & Villas ha sido reconocido con el certificado internacional Green Key, posicionándose como un referente en sostenibilidad dentro del panorama turístico balear. Este hito consolida dos décadas de trabajo consciente, orientado a la preservación del entorno, la cultura local y el modelo de turismo regenerativo.
Un modelo sostenible con alma ibicenca
Fundado en 2003 por Tina Soriano y Lucas Prats sobre una finca de labranza familiar del siglo XIX, Can Lluc ha crecido con una identidad íntimamente ligada al territorio. El hotel, que combina arquitectura tradicional, diseño mediterráneo y hospitalidad personalizada, fue rehabilitado por el arquitecto ibicenco José Torres y decorado por diseñadores locales, manteniendo siempre la autenticidad de sus orígenes.
Desde su apertura, Can Lluc ha impulsado un modelo de gestión sostenible basado en el uso de energías limpias, la autonomía hídrica, la reducción del consumo, el empleo de vegetación autóctona y la eliminación de plásticos de un solo uso. Además, todo el equipo está formado en criterios medioambientales, y la información sobre sus políticas de sostenibilidad se comunica claramente a los huéspedes desde su llegada.
Qué implica el certificado Green Key
El sello Green Key es una de las certificaciones ambientales más exigentes y reconocidas del mundo. Promovido por la Foundation for Environmental Education y gestionado en España por la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (ADEAC), este distintivo garantiza el cumplimiento de estándares en áreas como energía, agua, residuos, limpieza, alimentación, implicación social y responsabilidad ambiental.
El proceso de obtención exige auditorías técnicas y planes de mejora continua. A día de hoy, más de 5.000 establecimientos en más de 60 países han sido certificados. Can Lluc es el primer agroturismo de Ibiza en obtenerlo y el segundo hotel de la isla, después de Six Senses Ibiza.

Compromiso con la comunidad y el producto local
Can Lluc mantiene una estrecha colaboración con entidades locales, como la Colla de Ball Pagès, la parroquia de Sant Rafel y el club de fútbol del pueblo. También participa activamente en campañas medioambientales, como la protección de la lagartija autóctona Podarcis pityusensis, en colaboración con Ibiza Preservation Fund.
En el ámbito gastronómico, el hotel apuesta por productos de proximidad y cosecha propia. En su restaurante se sirve aceite de oliva virgen elaborado con olivos centenarios de la finca, vinos de bodegas ibicencas como Can Rich y Can Maymó, y una selección de ingredientes frescos del mar y del campo local.
Una experiencia consciente en plena naturaleza
Más allá del alojamiento, Can Lluc ofrece experiencias transformadoras en conexión con la Ibiza rural. Rutas de senderismo, retiros de bienestar, estancias largas para nómadas digitales, celebraciones privadas y una atmósfera de desconexión total forman parte de su propuesta de valor.
El hotel cuenta con 25 habitaciones, 16 de ellas villas privadas rodeadas de jardines mediterráneos. Entre sus instalaciones destacan una piscina con cascada, zona wellness con masajes, clases de yoga al aire libre, camas balinesas, parque infantil y una cocina saludable basada en el respeto al entorno.
Reconocimientos y visión de futuro
Además del certificado Green Key, Can Lluc ha sido elegido recientemente miembro de Beyond Green, la prestigiosa red internacional de hoteles comprometidos con el turismo sostenible, impulsada por Preferred Travel Group. También ha sido distinguido con el sello SICTED y nombrado “Establecimiento turístico independiente más exclusivo de España” en los Premios Mencey Futurista 2025.
Can Lluc reafirma así su papel como referente en turismo regenerativo, combinando lujo sereno, tradición local y respeto por el entorno, en una Ibiza que apuesta por la sostenibilidad sin renunciar a su esencia.