La Conselleria balear de Medio Ambiente detectó esta semana varios casos de chárter ilegal en la playa de ses Salines (Ibiza). En un control realizado por dos agentes fueron sorprendidos tres patrones sin autorización, mientras que otro logró esquivar la inspección en sa Canal y un quinto se dio a la fuga desde la orilla con clientes a bordo.
La playa funciona en la práctica como un puerto deportivo encubierto, con un constante movimiento de ‘dinguis’ que usan el canal reservado a emergencias. Testigos aseguran que en apenas tres horas pueden contabilizarse hasta una docena de embarcaciones, según ha revelado Periódico de Ibiza.
-
Siete actas por fondear sobre posidonia en Ibiza: los multazos que te pueden arruinar las vacaciones
El Govern confirmó que ninguna empresa tiene permiso para operar como base de chárter en ses Salines y que estas prácticas constituyen una ocupación ilegal del dominio público marítimo-terrestre. El uso particular de auxiliares no está prohibido, pero sí lo está su explotación comercial encubierta.
