CONTROVERSIA FECAL

¿Hay contaminación en la famosa playa de los atardeceres de Ibiza? Por qué difieren las versiones de lo pasa en Sant Antoni

Tras varias idas y vueltas y versiones contrapuestas entre el Ayuntamiento y la organización Salvem sa Badia, el Consistorio pone en duda las muestras de la organización ecologista.

Playa de Caló des Moro, Sant Antoni.
Playa de Caló des Moro, Sant Antoni.

¿Hay contaminación en las aguas de Caló des Moro, una de las playas más icónicas de la isla, conocida por congregar a una multitud que acude diariamente a la llamada de la puesta de sol?

En los últimos días, el Ayuntamiento de Sant Antoni y la organización Salvem Sa Badia, marca del Club Náutico de Sant Antoni, cruzaron versiones contrapuestas. Y cada parte justificó que se basaban en muestras tomadas en la zona después de que un vertido de aguas fecales llegara al mar.

Mientras que desde el Consistorio aseguraron que los análisis señalaban la ausencia de E. coli y enterococos intestinales en la zona de baño, Salvem sa Badia compartió un análisis de muestras propias que revela un nivel de contaminación cuatro veces superior al permitido.

“El Ayuntamiento de Sant Antoni de Portmany no pone en duda los resultados que hayan podido obtener de las muestras recogidas por Salvem sa Badia, pero sí del procedimiento y el punto de recogida de las muestras”, ha alertado el Consistorio ante la consulta de La Voz de Ibiza.

El Ayuntamiento ha insistido en que “el departamento de Medio Ambiente sigue un protocolo específico para estos incidentes y las muestras se recogen por personal autorizado, por lo que se ratifica en los resultados obtenidos en el análisis, que dieron negativo, no existiendo presencia de ninguno de los indicadores utilizados para la calificación de las aguas de baño (e.coli y enterococos intestinales)”.

Al mismo tiempo, el Consistorio ha puesto en duda los análisis de la organización ecologista. “En la misma analítica publicada por Salvem sa Badia se confirma que se recogió la muestra por sus propios medios y no se especifica el punto de muestreo, por lo que el procedimiento no sería válido en los protocolos exigidos en la administración pública”, han señalado.

Contenido relacionado  Peligran los desayunos en los hoteles de Ibiza por la falta de café y mantequilla: ¿Qué está pasando?

“Si la toma de muestras fue donde debería haberse recogido, no entendemos las discrepancias con las obtenidas por el Ayuntamiento, por lo que pensamos que la zona de muestreo podría no ser la adecuada”, han concluido.

Vertidos fecales

La denuncia original proviene de fines de abril. Según Salvem Sa Badia, el martes 29 un vertido de aguas fecales llegó a la playa de Caló des Moro. La organización criticó que el Ayuntamiento no toma medidas ante una posible contaminación del agua: no se delimitó la zona de baño ni se advirtió a los visitantes.

El Consistorio confirmó al día siguiente de estos hechos que hubo “una obstrucción del alcantarillado dentro del núcleo urbano”. Y que “en las labores de recuperación y desatasco, provocada por un mal uso de la red de alcantarillado, se produjo un vertido a la red de pluviales por gravedad.

Salvem sa Badia ha señalado que las muestras para su análisis (que detectó la presencia de 738 unidades formadoras de colonias de enterococos intestinales en 100 mililitros) fueron tomadas más dos horas después de la riada de heces, que tuvo lugar sobre las 15 horas del día en cuestión.

 

Scroll al inicio
logo bandas