La decisión de Donald Trump de reactivar su política arancelaria ha puesto en alerta a los mercados internacionales. Aunque a primera vista parezca un asunto lejano, la realidad es que sus efectos pueden sentirse con fuerza en el mercado inmobiliario español. Desde las hipotecas hasta la construcción, pasando por la demanda extranjera, el llamado ‘efecto Trump’ ya genera inquietud entre los expertos y otros analistas del sector.
Adiós a las variables: el cliente se refugia en la hipoteca fija
Uno de los impactos más visibles se produce en la elección de hipotecas. Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en enero de 2025 solo el 35,8% de las nuevas hipotecas se firmaron a tipo variable, frente al 64,2% a tipo fijo —una categoría que también incluye productos mixtos—.
Pero la cifra real de hipotecas variables puras es aún menor. Ricardo Gulias, CEO de RN Tu Solución Hipotecaria, explica que “las variables que se están firmando no son variables estrictas, sino mixtas que luego pasan a variable”. Y sentencia: “Pocos consumidores contratan hoy una hipoteca variable”.
El cambio de tendencia responde al recuerdo reciente de la subida del euríbor a partir de 2022, cuando el Banco Central Europeo (BCE) elevó los tipos del 0% al 4,5% en poco más de un año. “Mucha gente vio cómo su cuota mensual subía más de 200 euros de un año para otro”, recuerda Simone Colombelli, director de Hipotecas de iAhorro. Por eso, aunque el euríbor haya empezado a moderarse, el miedo sigue presente.
La banca afina su oferta fija para perfiles solventes
Al mismo tiempo, los bancos están ofreciendo condiciones muy competitivas en hipotecas fijas. “Ya vemos entidades ofreciendo tipos fijos del 1,80% TIN a perfiles muy solventes, con bajo ratio de endeudamiento y estabilidad laboral”, indica Colombelli.
Esto reduce aún más el atractivo del tipo variable. “Ante la posibilidad de pagar una cuota constante y asequible —y evitar sustos si el euríbor repunta en el futuro—, la mayoría de los clientes se decantarán por la hipoteca fija”, añade Miquel Riera, experto en Hipotecas del comparador HelpMyCash, otro de los citados por el medio 20minutos.
Trump y el ladrillo: menos compradores extranjeros, más costes para construir
A este contexto se suma ahora la nueva guerra comercial iniciada por Trump. Para Sergio Gutiérrez, analista inmobiliario con amplia presencia en redes sociales (más de 200.000 seguidores en Instagram, donde publica análisis bajo el perfil @sergio_excellence_circle), la decisión del expresidente estadounidense podría tener “efectos muy claros en España”, especialmente en zonas donde la demanda internacional es clave.
“Mucho ojo, porque están cambiando las reglas del juego”, advierte Gutiérrez en uno de sus vídeos recientes. A su juicio, el encarecimiento de las exportaciones europeas podría frenar la capacidad adquisitiva de potenciales compradores en España. “Si Alemania vende menos coches, no podrá comprar tus casitas en Mallorca”, resume.
Baleares, la Costa del Sol o zonas de Alicante dependen en gran medida de la inversión extranjera, especialmente europea. Un freno económico en estos países podría traducirse en menos compraventas, mayor oferta disponible y, a medio plazo, bajadas de precios.
Construir costará más: materiales más caros y menos promociones
El impacto de los aranceles también podría notarse en el coste de construcción. Gutiérrez recuerda que muchas materias primas —desde acero a componentes tecnológicos— se importan desde fuera de Europa. “Si suben las materias primas, construir será más caro”, afirma. Y eso, unido a un posible descenso en la demanda, podría hacer que muchas promociones no lleguen a arrancar.
Aunque el efecto no será inmediato, el analista alerta: “En tres meses puede que no lo notemos, pero en un año sí. Este puede ser el comienzo de un nuevo ciclo”.
¿Y si quiero vender? “Ahora puede ser el momento”
Con este panorama, algunos expertos aconsejan a los propietarios valorar una venta a corto plazo. “Si hay una reducción progresiva de la demanda extranjera, los precios actuales pueden no mantenerse”, advierte Gutiérrez. En un mercado donde la compraventa depende tanto del contexto internacional, anticiparse puede marcar la diferencia entre vender bien o tener que ajustar precios más adelante.
La AHE apunta a un auge de las hipotecas mixtas
Desde la Asociación Hipotecaria Española (AHE), la analista Leyre López señala que, en escenarios inflacionistas provocados por conflictos comerciales, “es probable que emerjan las hipotecas mixtas en detrimento de las variables”. Estos productos ofrecen un tipo fijo durante los primeros años del préstamo, lo que da cierta estabilidad, con la expectativa de que los tipos se estabilicen cuando la hipoteca pase a variable.
Conclusión: prudencia y visión a medio plazo
La suma de factores —tipos aún elevados, incertidumbre internacional, menor demanda exterior y encarecimiento de costes— dibuja un escenario complejo para el sector inmobiliario español. Las hipotecas fijas y mixtas ganan protagonismo, mientras el ladrillo depende cada vez más de variables que llegan desde fuera.
Ante esta situación, los expertos coinciden en recomendar cautela. Planificar bien una hipoteca, analizar el contexto global y valorar si es buen momento para vender son ahora decisiones clave. Porque el mercado ya no se mueve solo por lo que pasa en Madrid o Barcelona, sino también por lo que decida Washington.