El Consell de Ibiza ha iniciado los trámites para identificar oficialmente sus zonas turísticas más saturadas y degradadas, conocidas como zonas maduras, con el objetivo de impulsar su regeneración urbana y social. Así lo acordó este lunes el Consell d’Alcaldes, que respaldó la creación de un documento estratégico insular que delimite estas áreas en base a la Ley de Turismo de las Illes Balears.
La medida busca acreditar con datos objetivos la necesidad de intervención en determinadas zonas de la isla que sufren problemas de sobreexplotación turística, deterioro del espacio público o dificultades de convivencia con los residentes.
“Identificar estas zonas es una oportunidad para mejorar la oferta turística y facilitar la vida de quienes residen allí”, señaló el presidente del Consell, Vicent Marí.
Más inversiones, menos trámites
El nuevo plan permitirá a Ibiza optar a fondos públicos destinados a modernización y facilitará la inversión privada, ya que los propietarios podrán acortar plazos administrativos para realizar obras de mejora, como proyectos de eficiencia energética o rehabilitación urbana.
El objetivo es desarrollar un plan común para todas las zonas maduras, que incluya actuaciones prioritarias, tanto públicas como privadas, dirigidas a:
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Reducir la presión turística excesiva.
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Revalorizar infraestructuras y servicios deteriorados.
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Fomentar una actividad económica más diversa.
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Garantizar una mejor habitabilidad para los residentes.
Paso previo al PIAT
La delimitación de zonas maduras es también un paso imprescindible para avanzar en la redacción del PIAT (Plan de Intervención en Ámbitos Turísticos), la herramienta de ordenación del territorio que definirá el futuro modelo turístico de la isla.
Con esta estrategia, el Consell busca poner el foco en zonas que han quedado rezagadas, reducir la concentración de actividades turísticas en áreas colapsadas y establecer criterios para la renovación selectiva.
“Este documento nos permitirá planificar medidas urgentes de regeneración”, explicó Marí, quien ha recalcado que se trata de una oportunidad para “mejorar la convivencia y el entorno”.