La consellera de Salud, Manuela García, aseguró este martes en el Parlament que la crisis del servicio de ambulancias de la empresa pública GSAIB responde a un “contrato fallido” del anterior Govern.
Respondía así a las críticas de la diputada socialista Irantzu Fernández, que la acusó de “provocar el caos” y de “tener planes” para que el personal deje de pertenecer a la empresa pública.
García insistió en que se trata de una “herencia de la mejorable gestión” de la pasada legislatura y explicó que la situación deriva de la antigüedad y el kilometraje de la flota, que debía renovarse en 2023.
La consellera anunció que las nuevas ambulancias llegarán en las próximas semanas, con lo que se espera reforzar el servicio en las islas.
En el mismo pleno, defendió que el Govern ha reducido listas y tiempos de espera en sanidad, pese a que la diputada del PSIB Patricia Gómez aseguró lo contrario y cuestionó “a quién se quiere beneficiar” con la actual política sanitaria.
UGT alerta del “grave abandono” en Ibiza y Formentera
Desde hace meses, la Unión General de Trabajadores (UGT) viene denunciando el “grave abandono” del transporte sanitario urgente y no urgente en Ibiza y Formentera, acusando al IB-Salut y a GSAIB de incumplir compromisos y poner en riesgo la seguridad de pacientes y profesionales.
Según el sindicato, de las tres nuevas ambulancias anunciadas para Ibiza en agosto, solo han llegado dos y una de ellas con la camilla rota.
En Formentera, añadió, no existe cobertura completa del servicio programado fuera del horario de lunes a viernes, ya que el SAMU 061 emplea la única ambulancia de urgencias para altas hospitalarias.
Deficiencias en bases y medios
UGT advirtió también de deficiencias en la base insular de Formentera, inaugurada con una inversión de un millón de euros, que presenta puertas que no cierran, ausencia de control de acceso y presencia de personas ajenas durmiendo en las instalaciones.
En Ibiza, el sindicato reclama una nave adaptada para proteger las ambulancias, como ya existe en Mallorca y Menorca, así como medidas para resguardar el material y la medicación del calor extremo, que en verano alcanza los 50 °C en vehículos estacionados en San Antonio.
Entre las carencias denunciadas, UGT señaló que el vehículo LIMA del Hospital Can Misses permanece inutilizado por falta de personal, pese a la existencia de trabajadores en bolsa. También pidió que la ambulancia de soporte vital básico (SVB) de Sant Joan esté operativa durante todo el año y que la de San Agustín funcione las 24 horas de manera estable, ya que actualmente solo ofrece ese servicio durante el verano.












